La Policía Local de Elche ha interpuesto desde junio hasta la actualidad 82 multas a pescadores por incumplir la ordenanza local que regula esta práctica. La mayor parte de los incumplimientos del año se suelen producir en la temporada estival, cuando las playas tienen una gran afluencia, mientras que la pesca sin licencia, fuera de los lugares autorizados o en las franjas horarias no dispuestas suelen ser los motivos de más sanciones, según indica el edil de Seguridad Ciudadana, Ramón Abad.

Hay que tener en cuenta que según la ordenanza local de uso y disfrute del litoral, «cualquier actividad de pesca realizada dentro del horario establecido quedará supeditada a la ausencia de usuarios en la playa», por lo tanto los pescadores tienen que encontrar lugares en los que no haya un tránsito amplio de bañistas, por lo que muchas veces optan por acudir de noche con linternas o exponerse a ser multados si no cumplen, aunque es cierto que a partir del 15 de septiembre las medidas se alivian al acabar la temporada de baño. Esta situación también se repite en otras partes del litoral como Santa Pola.

En la villa marinera se han interpuesto en este mismo periodo unas 15 sanciones. Según indican desde el cuerpo local de policía, la mayoría de sanciones son por realizar la actividad en lugares no autorizados como la playa del Pinet, Varadero y Playa lisa. La ordenanza de la villa marinera marca que «queda prohibida la pesca durante todo el año en los canales de acceso a puertos, en el interior de ellos y a menos de 100 metros de lugares frecuentados por bañistas».

Igualmente, desde la Policía Local aseguran que se han recibido varias denuncias de vecinos que en los últimos meses han resultado heridos debido a los anzuelos que dejan en la arena ciertos pescadores. Aún y así, asociaciones de pesca recreativa piden que no se generalice ya que hay una buena parte del sector que sí que cumple con los criterios que rigen estas ordenanzas. De igual forma, reprochan que en muchos casos llega a ser demasiado restrictiva la regulación local ya que les obliga a concentrarse en ciertos espigones sin que tengan demasiado margen para desarrollar de una forma tranquila su actividad.