La Residencia de Mayores de Altabix, en Elche, lleva desde el pasado 1 de octubre sin médico, según denuncian desde la Asociación por los Derechos y el Bienestar de los Ancianos en Residencias (ADBAR). Una situación que desde la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, que dirige Mónica Óltra, dicen que «no se puede tolerar», y que, si lo confirma la inspección, «llevará aparejada una sanción» a la empresa que presta el servicio.

Las quejas de los familiares en torno a la gestión de la Residencia de Mayores de Altabix no son nuevas. De hecho, el colectivo asegura que «ya han pasado siete médicos por este centro de atención residencial desde septiembre de 2019», aunque, a la vez, reconocen estar más satisfechos con una cambio producido hace poco en la dirección, a pesar de que el centro lleve varias semanas sin médico, y de que el centenar de residentes tenga que ser atendido, de forma excepcional, por facultativos del centro de salud de Altabix.

El continuo cambio de personal que se registra en este centro también afecta al personal de enfermería. La secretaria de ADBAR, Ester Pascual, explicó que «es tremendo el continuo cambio de coordinadores sanitarios. Desde el 2015 ha habido 9 coordinadores de enfermería. Y también es enorme la rotación de enfermeros y enfermeras». Para los familiares, «esto no favorece ni la continuidad de los cuidados ofrecidos, ni un oportuno seguimiento de los mismos, especialmente tratándose de un colectivo tan vulnerable».

Respecto a la ausencia de un médico desde el pasado 1 de octubre, añade Ester Pascual, «aunque el director nos transmite que están realizando una búsqueda activa del mismo, esta situación es insostenible, son ya muchos días sin este profesional. También sabemos que puntualmente acude el médico del Centro de Salud de Altabix, adscrito a la residencia, pero esto es totalmente insuficiente dada la fragilidad de los residentes, la gravedad de algunas de sus patologías, las delicadas situaciones que pueden darse y que pueden precisar atención inmediata, y otros factores fácilmente imaginables en las actuales circunstancias».

Para el colectivo de familias la empresa que tiene la concesión de la residencia, que es La SaletaCare S.L., «está incurriendo en un grave incumplimiento del pliego de prescripciones técnicas», y reclama que «las consellerias de Igualdad y Políticas Inclusivas y la de Sanitat Universal i Salut Pública, deben involucrarse en la búsqueda del mismo, porque los más de 100 residentes de esta residencia no están recibiendo la atención sanitaria a la que tienen derecho».

Uno de los factores que influyen en la «fuga de personal sanitario», apuntan desde el colectivo de familiares, es la gran diferencia salarial que hay entre el personal que trabaja en residencias de mayores y la misma categoría profesional en hospitales o centros de salud públicos. «No está suficientemente remunerado el personal de residencias y es mucha la carga de trabajo que asumen puesto que la ley que regula las ratios lleva muchos años sin modificarse», apuntó Ester Pascual. Esta demanda, añaden desde el colectivo, «se ha trasladado a la Conselleria de Mónica Oltra en múltiples ocasiones, pero también postergan estos cambios y con ello, se eternizan los problemas».

Desde la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas sostienen que para que el servicio que se presta en las residencias sea el correcto necesitan aumentar la plantilla de inspectores, y que en este sentido se está trabajando. De hecho, fuentes de la conselleria aseguraron que «vamos a contar con doce nuevos inspectores con el objetivo de estar muy cerca del trabajo que se lleva a cabo en las residencias y velar por que no hayan incumplimientos».

La asociación de familiares de la Residencia de Mayores de Altabix también reclama mejoras en las instalaciones. Concretamente, destacan que «la residencia adolece de una necesidad urgente de reformas tanto en su interior como en su exterior, pero el estado del jardín es especialmente preocupante. Cualquier ilicitano que pasee por sus alrededores puede observar su tedioso y deplorable aspecto».

Los familiares llevan ocho años esperando que se lleve a cabo una obra de mejora en el jardín de la residencia. «No aceptamos que sólo se realicen unos pequeños arreglos en el interior como parche, queremos un jardín en condiciones al que puedan salir nuestros mayores a fortalecer sus debilitados sistemas inmunitarios, a pasear, o a tomar el sol».

Por otro lado, al margen de la obra, el colectivo de familiares asegura que «la empresa concesionaria, La Saleta Care S.L., ni siquiera lo limpia ni lo mantiene: tiene enseres esparcidos, trozos de fuente rotas, todo el suelo levantado, las pocas plantas que hay están destrozadas, se han encontrado hasta ratas».

Por este motivo, reclaman no solo que se lleve a cabo la inversión que llevan años esperando para mejorar las instalaciones, sino que después se controle que la empresa que gestiona el centro lo mantenga en un estado adecuado para los residentes.

La empresa no da explicaciones sobre la situación médica

La Residencia de Mayores de Altabix es pública de gestión privada. La concesionaria es la empresa La Saleta Care S.L., que recientemente ha llevado a cabo un cambio en la dirección del centro ilicitano. Este diario trató ayer de contactar con la dirección de la residencia para conocer la explicación que dan a la ausencia de médico desde el 1 de octubre, como denuncian los familiares, y qué gestiones están realizando para volver a contar con este servicio para los usuarios. Sin embargo, este diario no obtuvo ninguna respuesta del centro.

Reclaman mejorar el jardín del complejo

Quejas por el mal estado del exterior del edificio donde salen los internos a pasear y a hacer ejercicio