La pandemia va a obligar a que estas Navidades sean muy diferentes en todos los aspectos y Elche no se libra de esos cambios. Por este motivo, algunas estampas y escenarios tradicionales van a tener que ser modificados. Este es el caso del tradicional Belén que cada año instala por estas fechas la Asociación de Belenistas en la Glorieta y que este año tendrá una nueva ubicación a causa del covid-19. Su destino será el Hort del Xocolater con el objetivo de que se eviten aglomeraciones y se pueda garantizar mejor la seguridad, ya que este espectacular Belén suele ser uno de los grandes reclamos de las fiestas navideñas que más visitantes consiguen atraer.

La nueva ubicación del nacimiento en el Hort del Xocolater fue confirmada ayer por la responsable municipal del área de Fiestas, Mariola Galiana, en el acto en que se dio a conocer la reapertura del museo Casa del Belén, una instalación situada en la Plaça de la Fruita que ha permanecido cerrada durante meses a consecuencia de la pandemia. El museo se reabre aprovechando que se aproxima la celebración navideña y que se puede garantizar el cumplimiento de las medidas de higiene entre todos sus visitantes. La Casa del Belén vuelve a abrir sus puertas con la instalación de nuevas escenas, entre ellas siete dioramas inspirados en la Semana Santa, la renovación de su sistema de iluminación a través de la instalación de bombillas LED y trabajos de restauración del arbolado y la vegetación de los distintos belenes bíblicos que se exponen.

Mercado cancelado

Otro de los contratiempos que va a provocar este año la pandemia en relación a la celebración de la Navidad es el de la suspensión del mercado, una iniciativa que fue puesta en marcha en 2019 por el equipo de gobierno en el Paseo de la Estación y que contó con una gran acogida por parte de ilicitanos y visitantes. Galiana también confirmó ayer que la situación sanitaria impide su celebración y se recuperará cuando sea posible.

Por último, el Ayuntamiento ya ha comenzado la instalación de la iluminación navideña con las luces que son de su propiedad, a las que se sumarán las que han sido contratadas para este año.

Uno de los nacimientos que se pueden ver en el interior del céntrico museo. | ANTONIO AMORÓS