El concejal de Deportes de Elche, Vicente Alberola, publicó ayer una carta en la que pide responsabilidad para evitar contagios durante la práctica deportiva. «Tras la reunión mantenida por la consellera de Sanidad Universal y Salud Pública y el presidente de la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana respecto a la prohibición de espectadores en las competiciones federadas y tras la multitud de opiniones sobre este asunto en las distintas redes sociales y medios de comunicación, me he permitido realizar una pequeña reflexión sobre el asunto. El debate sobre la conveniencia de permitir el púbico en las distintas competiciones debería quedar eclipsado por la urgencia sanitaria que vivimos, sin más», comienza su escrito el responsable del área municipal de Deportes.

La situación epidemiológica que se sufre desde marzo ha afectado a muchas actividades, entre ellas la de la práctica deportiva en todos sus segmentos de edad. «Cualquier decisión tomada por las autoridades, todas ellas bajo el asesoramiento de los expertos, conlleva controversia y malestar, ya que no es grato el estar privados de las relaciones sociales ni dejar de hacer aquellas actividades a las que estamos acostumbrados. Pero nunca deberíamos olvidar a aquellos que han sufrido, sufren y que desgraciadamente seguirán sufriendo, todavía un tiempo, los azotes covid-19», continúa Alberola en su escrito.

Público en las gradas

El debate sobre la conveniencia de permitir el púbico en las distintas competiciones debería quedar eclipsado por la urgencia sanitaria, según la opinión que expresó ayer el concejal. «Puede ser cierto que no haya tanto riesgo si se toman las medidas adecuadas, pero otras actividades dirán lo mismo. Creo humildemente que la suma de las distintas restricciones en distintas facetas de nuestra vida cotidiana tendrá, y así lo refrendan los expertos sanitarios, una mayor efectividad que tomar decisiones en función de motivos que nada tengan que ver con lo sanitario», continuó su carta antes de finalizar: «Llevar al deportista y que realice su actividad e ir a dar un paseo, realizar compras, volver a casa o aquello que cada uno estime, siempre respetando las normas, beneficiaría a los niños».