La peatonalización de la calle Corredora, el descenso del tráfico a motor por el mero efecto del covid ante las limitaciones en la movilidad y la creación del nuevo y hasta cierto punto polémico carril bici en la avenida Juan Carlos I en Elche han dado como resultado que este vial haya reducido el paso de vehículos hasta más casi un 50%.
Así lo reflejan datos de la Concejalía de Movilidad Urbana que recogen que de algo más de 59.000 vehículos que pasaban semanalmente por la avenida Juan Carlos I antes de declararse el estado de alarma, se ha pasado ahora, de lunes a viernes, a los casi 31.000, esto es, un 48,7% menos.
«El objetivo de la Concejalía de Movilidad Urbana es disminuir la contaminación y mejorar los espacios destinados a la movilidad ciudadana. Se quiere conseguir una movilidad cada vez más eficiente y saludable para contribuir a mejorar la calidad de vida del municipio y conseguir que el espacio público sea un lugar más confortable y seguro», según los responsables de este área, que consideran que este tipo de medias contribuyen a «pacificar» la zona, y no solo en términos de contaminación, sino que también en cuanto a ruidos y seguridad vial.
Desde el equipo de gobierno se defiende además que las emisiones de los vehículos a motor se han rebajado sensiblemente en una avenida a la que, recuerdan, da a una parte del Palmeral ilicitano. «Es una calle que se encuentra en pleno corazón del Palmeral», recordaba la edil de Movilidad Urbana, Esther Díez.
No obstante, donde la concejala de Movilidad Urbana ve una «calle pacificada» y una oportunidad para que «se deje de utilizar como carretera nacional», la oposición considera que se ha generado un «embudo circulatorio» innecesario, en palabras del PP en concreto, y que en todo caso lo que se tenía que haber hecho era haber buscado un consenso, a juicio de los populares, Vox, Cs y el edil no adscrito.
El Ayuntamiento tiene constatado que el 90% de los conductores que utilizaba la calle Corredora no se quedaba en la zona, sino que tenían como destino otros barrios.
Además, la intensidad media horaria en días laborables en la plaza de Baix estaba cerca de 400 vehículos a la hora, cifra que descendía a aproximadamente 250 vehículos cada 60 minutos en aquellos fines de semana en los que permanecía abierto este carril.
La supresión de esta vía de acceso, junto con la reorganización de uno de los carriles de la avenida Juan Carlos I, que se ha destinado a carril bici, ha llevado a que, lógicamente, muchos conductores busquen alternativas circulatorias para no pasar por aquí. Esto y el efecto del covid han terminado por desplomar el tráfico rodado en uno de los viales más transitados, hasta ahora, del casco urbano de Elche.
Cerca de 2.000 firmas en desacuerdo con los nuevos itinerarios para bicicletas
La oposición asegura que hay unas 2.000 firmas en contra de cómo se han diseñado los últimos carriles bici en Elche, en concreto el de José María Buck y el de la avenida Juan Carlos I. Las voces más críticas indican que en el primer caso el ciclista tiene que hacer un «rally» y que con tanta señal horizontal pintada de distintos colores (amarillo, blanco, rojo...) no queda bien claro por dónde deben circular peatón y ciclista. Ante ello, desde el ejecutivo local se ha llegado a recordar que las bicicletas «tienen manillar» para girar y maniobrar. En cuanto a las críticas a la avenida Juan Carlos I, se apunta que los camiones de reparto tienen que ocupar el carril bici al detenerse en el tramo antes del antiguo Dum Dum, porque si aparcan en el carril sobrante paralizarían todo el tráfico. También se ha criticado que, con este carril bici, se ponen dificultados para el hotel o la farmacia de guardia, por si alguien tiene que parar de urgencia para bajar pesadas maletas o recoger algún fármaco a contratiempo. Por otro lado, a principios de marzo, por la calle José María Buck circulaban unos 8.600 vehículos a la semana. Actualmente, los registros apuntan a unos 5.500 vehículos tras acometerse el nuevo carril bici. Tanto en la avenida Juan Carlos I como en José María Buck, los jueves y viernes son, en general, los días que más tráfico rodado soportan. El domingo, evidentemente, es el día que menos.
