Un día después de la visita de las autoridades, entre ellas el presidente Pedro Sánchez, para inaugurar el AVE que conecta Elche con Madrid y de los discursos institucionales para ensalzar las virtudes de la nueva infraestructura, la estación de Matola vivió ayer su primera jornada de normalidad, con sus primeros cuatro trenes diarios, dos por la mañana y dos por la noche desde Orihuela y Elche hacia la capital española y en sentido inverso. Esperada la llegada de la Alta Velocidad desde hace mucho tiempo en la ciudad ilicitana, con promesas políticas que han ido retrasando continuamente su puesta en marcha, la estación de Matola lleva años generando debate, especulaciones y polémicas, sobre todo la que le acusa de ser un mero apeadero y no la estación prevista inicialmente. Un equipo de INFORMACIÓN se acercó ayer hasta la instalación ubicada en el Camp d’Elx para conocer sus secretos.

Aparcamiento de la estación de Matola

Los pocos trenes diarios, se espera que cuando la situación sanitaria lo permita se doble la frecuencia, provoca que la actividad en la estación no sea muy frenética. Cuando se llega a ella lo primero que llama la atención es que más de tres cuartas partas de sus plazas de aparcamiento permanecen vacías. El parking cuenta con capacidad para acoger 200 vehículos y, de momento, es gratuito, aunque Adif está buscando alguna empresa que se encargue de la explotación comercial de la zona de aparcamiento, para lo que se tendrán que instalar distintas barreras y parquímetros.

Imagen tomada ayer de la entrada principal de la estación de AVE que conecta desde el lunes Elche con Madrid, ubicada en la pedanía de Matola. | ANTONIO AMORÓS

Interior

Lo que más sorprende al entrar al interior del edificio de la estación de Matola son sus reducidas dimensiones. A mano izquierda quedan un pequeño despacho utilizado por el personal de Adif a modo de oficinas y las taquillas para venta de billetes, que cuentan con dos puestos en ventanilla y una máquina de venta automática como apoyo. El horario de la venta de billetes es de 6 a 11 horas y de 19.30 a 22.30 horas, por lo que en la parte central del día, entre las 11 y las 19.30 horas, permanecen cerradas. Los viajeros se encontrarán a mano derecha la zona de acceso a los andenes, en las que se encuentran los escáneres que se utilizan para cumplir con los protocolos de seguridad y un par de pantallas informativas con los horarios de los trenes.

Llamativo montaje del Molí Real y las vías del tren en el cauce del río. Los locales comerciales que están cerrados cuentas con fotografías gigantes que tapan su entrada. En uno de estos locales se puede observar una imagen de la Dama de Elche y en otro un curioso montaje, en el que aparece el Molí Real en una fotografía desde la ladera del río, con las vías del tren ocupando el cauce del Vinalopó.

Si a la izquierda quedan las oficinas y las taquillas y a la derecha el acceso a los andenes, los que lleguen a Matola se encontrarán de frente el único aseo que hay en el edificio y tres locales comerciales que, de momento, no han encontrado ninguna firma que se haya interesado por ellos. Todo ello en un simple golpe de vista. Adif espera que en estos locales se instalen los típicos negocios de las estaciones (restauración, kioscos, alguna tienda de souvenirs...) y mientras encuentra clientes ha decidido darle otros usos a los locales. El del centro permanece con la persiana levantada para que cualquiera pueda contemplar sus dimensiones interiores y en él se ha instalado una máquina para la venta de refrescos y chocolatinas y otra de café. En los otros dos locales se han colocado dos grandes imágenes promocionales, una con la Dama de Elche y una vista aérea del Camp d’Elx y otra que ha sido muy comentada, ya que se trata de un montaje en el que se puede ver el Molí Real y las supuestas vías del AVE en el espacio que está ocupado por el cauce del río Vinalopó.

Los conductores de autobús acuden a conocer su nuevo recorrido. La calma que reina en la estación de Matola, con apenas dos trenes a primera hora de la mañana y otros dos a última hora de la tarde, se rompió ayer con la llegada de una veintena de conductores de autobús. Los profesionales se acercaron a conocer el nuevo recorrido que deben realizar en el servicio habilitado por el Ayuntamiento.

Una de las grandes polémicas que lleva tiempo acompañando a la puesta en marcha de la estación de Matola es la de la falta de señalización en sus accesos que indique cómo se llega a ella. La instalación se encuentra alejada del casco urbano y la falta de señalización juega en contra de sus intereses. Es prácticamente imposible dar con un cartel que indique el camino a la estación al tomar el desvío de la carretera de Crevillent, porque todas las señales marcan la dirección de las pedanías de Matola y Algoda. Todo esto acrecienta la sensación extendida en Elche de que los ciudadanos se encuentran ante un mero apeadero de difícil acceso. Esta mañana, el concejal de Mantenimiento, Héctor Díez, ha anunciado que ya se ha comenzado a instalar la señalización informativa para facilitar el acceso a la nueva estación del AVE en Matola. Una acción que se ha llevado a cabo coincidiendo con la puesta en marcha de la línea que une Elche con Madrid.

El edil ha explicado que “el ministerio de Transportes será el encargado de señalizar tanto la autovía A-7 como la carretera Nacional340, mientras que el Ayuntamiento está ya señalizando los itinerarios urbanos: tanto el acceso desde la Ronda Sur y la Avenida Ramón Pastor, como el itinerario desde el centro de la ciudad por la Avenida de la Libertad o el acceso desde la Ronda Oeste de Carrús hasta la Nacional 340”.

Siguen los trabajos de los operarios para poner a punto la instalación. La calma que reina en la estación de Matola, con apenas dos trenes a primera hora de la mañana y otros dos a última hora de la tarde, se rompió ayer con la llegada de una veintena de conductores de autobús. Los profesionales se acercaron a conocer el nuevo recorrido que deben realizar en el servicio habilitado por el Ayuntamiento.

Autobuses y taxis

Ante la ausencia de conexión de la estación con el casco urbano, por ahora solo se puede acceder a ella a través de carretera. Al margen del servicio de taxis, el Ayuntamiento ha habilitado desde este lunes un servicio de autobús que conecta la ciudad con el AVE. Este servicio está formado por catorce paradas que abarcan el barrio de Altabix, la zona centro o la avenida de la Libertad y la tarifa es equivalente al billete ordinario, 1,35 euros. El autobús de la mañana arranca a las 6 horas, el AVE sale de Elche a las 6.40 horas, y el autobús de la noche inicia su recorrido a las 20.15 horas, 45 minutos antes de que lo haga el tren con destino a la capital española.

Otra de las dudas que había era la del precio de los billetes. La oferta diaria es de 1.264 plazas y el precio del trayecto en clase turista es de 71,10 euros, aunque en estos días iniciales se han puesto en marcha diferentes promociones con descuentos que oscilan entre el 30 y el 70%. Estas son las luces y las sombras de la llegada del AVE, en lo que iba a ser una gran estación que para muchos no pasa de ser un simple apeadero.