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Los promotores de la zona comercial de la N-340 en Elche aspiran a comenzar las obras en un año

El Ayuntamiento tramita ya el Plan Parcial del proyecto que deberá contar con el visto bueno de Adif, Carreteras y la CHJ - La iniciativa prevé medianas superficies en planta baja y una altura

Los terrenos industriales de la carretera de Alicante, donde promotores de calzado quieren construir una zona comercial. | ANTONIO AMORÓS

Los promotores de la nueva área comercial proyectada en carretera de Alicante (N-340) estiman que podrán iniciar las obras de urbanización y de construcción en el plazo de un año, una vez que el Ayuntamiento ha comenzado ya a tramitar el Plan Parcial del sector (E-22), que supone el punto de partida de un sinfín de trámites urbanísticos y de consultas a otras administraciones como la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y de Carreteras.

En la parcela, de 50.000 metros cuadrados, los impulsores de la iniciativa, entre ellos, el empresario de calzado, Manuel Román, han previsto, un modelo de zona comercial de mediana superficie, similar a la que ya tiene Elche, similar a la del Sauce (Carrefour), con la mayoría de negocios en planta baja, aunque también barajan hacer una planta de altura como máximo y un aparcamiento de 900 plazas. El proyecto está pensado para albergar hostelería y comercios.

La intención de los impulsores de esta iniciativa, es, además, tratar de acortar los plazos lo máximo posible y urbanizar y construir de manera simultánea, de ahí que se hayan marcado 2022 como año para empezar a hacer realidad este proyecto, cuyas obras podrían extenderse otro año, si la burocracia no lo impide. Los arquitectos del proyecto ya están trabajando de hecho, en el proyecto de urbanización.

El desarrollo de esta iniciativa comercial se une a la que va a contar Elche a pocos metros, en el estadio Martínez Valero, pero con otra filosofía distinta, ya que la que va a empezar a construirse en el campo de fútbol está enfocada más al ocio que al comercio. Este tipo de iniciativas, junto a otros supermercados que han abierto recientemente y que están por venir, evidencian la expansión de la ciudad en la zona nueva de Altabix. Y precisamente, junto a este sector se está preparando el terreno ahora mismo para un residencial de más de un millar de viviendas (el E-21), entre la Ronda Este y Mesalina, que contará con un nuevo puente, ahora en construcción, para unir la avenida Jubalcoy con este residencial. Aquí, también hay previsto crear una zona con supermercado, tiendas y restauración para dar servicio al nuevo barrio. Pero, la iniciativa es a pequeña escala, de 18.000 metros cuadrados y todavía es muy incipiente, ya que no está el proyecto presentado en el Ayuntamiento.

Si bien, en el caso de la zona comercial junto a la N-340, la pandemia ha dado un giro de ochenta grados a la apuesta de los propietarios de Comerplast porque la idea inicial pasaba por hacer un centro comercial abierto (similar al de la Zenia) en el que incluyeron incluso la construcción de un hotel de once plantas. El coste aproximado de la urbanización de los terrenos será de 7 millones de euros y la inversión total que prevén sus impulsores rondará los 40 millones. Una cuantía que dista mucho de los 200 millones de euros que estimaron inicialmente los promotores de la obra.

Según explicó Manuel Roman a este diario, han visto que será mucho más fácil dar salida a una iniciativa más modesta que a la de aquel macrocentro comercial que anunciaron. Las parcelas donde se proyecta el centro de medias son de uso industrial y terciario, donde ahora se asientan fábricas relacionadas con el calzado. Al lado de estos terrenos, el Ayuntamiento cuenta además con una parcela de 7.000 metros cuadrados y otra de 4.200 para equipamientos.

De zona industrial a una manzana abierta para hostelería y tiendas

El uso predominante del sector junto a la N-332 es el Industrial. Actualmente, las edificaciones existentes son en su mayoría 15 naves industriales de 1 o 2 alturas con una antigüedad media de 30 años, algunas de ellas sin uso. Esa parcela donde ahora se proyecta un área comercial ha quedado integrada en la zona de expansión de la ciudad junto a nuevos barrios y futuros residenciales que demandan más servicios. Esta iniciativa de medianas superficies tendrá, según recoge el Plan Parcial, forma en «L». Sus promotores han propuesto cambiar el uso característico Industrial a comercial en manzana abierta para hostelería y tiendas.

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