Hasta la Cruz de los Caídos han llegado las pintadas de los ojos que desde hace semanas se extienden sin tregua por el centro y barrios próximos superando ya la treintena de sitios marcados. La Policía Local de Elche sigue tras la pista de los artífices de unas gamberradas por las que se van a enfrentar a una detención por haber cometido infracciones administrativas e incluso un delito de daños. A ello se suma que podrán acabar pagando multas de hasta 750 euros por dibujo.
La aparición de los misteriosos ojos, de colores, con tres pestañas y algunos con símbolos en la parte inferior en el mobiliario urbano y fachadas de edificios y comercios desde hace unas semanas está originando desconcierto en la ciudad. Los agentes dan por descartados que sean grafiteros fichados en anteriores ocasiones, según el edil de Seguridad, Ramón Abad, y tampoco tienen conocimiento de que en otra ciudad cercana se haya dado este tipo de infracción.
Lo que parece claro es que no es una persona la que está detrás de este acto vandálico, sino varias, y que por el nivel que han alcanzado ya las pintadas se les van a abrir diligencias penales, tal y como indicó el concejal del área.
Siempre depende del dinero que vaya a costar reparar todos los daños que están ocasionado. Si no se pueden eliminar con la mera limpieza y requieren de un tratamiento específico o de la sustitución de lo que ha pintado estaríamos hablando de un delito de daños, tal y como indicaron desde la Unidad de Urbanidad y Medio Ambiente de la Policía Local.
Para dar «caza» a los autores de estos ojos, este departamento policial cuenta con un perito calígrafo trabajando sin descanso, un equipo especializado que permite identificar cada uno de los garabatos y realizar una atribución a cada una de las pintadas, que luego sirve para presentarla en los juzgados, una prueba documental que permite que condenen a los autores de estas gamberradas por todos los daños ocasionados.
Además de ese análisis exhaustivo de cada trazo de las pintadas, los agentes también logran capturar a los artífices de las pintadas con otras vías de trabajo diario. Desde seguir las redes sociales, realizar identificaciones en lugares donde suelen juntarse este tipo de jóvenes, unido a la labor que realizan las unidades territoriales.
Desde hace cuatro años, estos agentes han interpuesto más de un centenar de infracciones administrativas por este tipo de hechos. Respecto a detenciones por delito de daños han habido más de una veintena de detenidos unas veces propios de policía local y en otras ocasiones en colaboración con otras fuerzas y cuerpos de seguridad. El último caso y más sonado fue la detención de los ya conocidos como los «grafiteros de Renfe», acusados de pintar 49 vagones del tren. La detención, practicada por la Policía Nacional, fue gracias al trabajo pericial de los agentes de la Policía Local de Elche.
Desde esta unidad, considerada ya como auténticos detectives del grafitti y de las pintadas, aseguran que desde que la pusieron en marcha los actos vandálicos de este tipo han ido a menos. Ahora, tienen como desafío dar con una «crew» o colectivo que está llenando la calle de unos desconcertantes ojos que están lejos de parecerse a un grafiti como tal.
Gamberradas que se salen de las zonas habituales
Con símbolos o bajo letras o simples ojos, en farolas, paredes de kioscos, muros de huertos de Palmeras, edificios, comercios, bares... los dichosos dibujos han llenado buena parte del centro de Elche, pero también del Sector V y El Pla. Las zonas más dadas a pintadas suelen ser siempre las entradas a las ciudades y cuando aparecen en el casco urbano lo habitual es que sea cerca de zonas de zonas de ocio, según la Policía Local. En el caso de los ojos está siendo distinto.
