Si las piscinas son todos los años uno de los mejores remedios contra las sofocantes temperaturas estivales, este verano se han convertido en el mejor aliado para hacer frente a las olas de calor, con los termómetros superando los 40 grados durante las últimas jornadas en algunos puntos del término municipal ilicitano. El hecho de que las temperaturas se hayan disparado, unido a que en esta ocasión menos ciudadanos de Elche hayan optado por viajar en sus vacaciones, debido a las restricciones que implica la pandemia, ha provocado que prácticamente todos los días se esté completando el aforo en las ochos piscinas municipales.
Otros factores contribuyen a que se roce el lleno casi a diario, entre ellos el hecho de que las piscinas sean una forma de ocio seguro para que disfruten mayores y pequeños o que su acceso sea bastante asequible, algo a tener en cuenta en unos tiempos en los que se acarrean las consecuencias económicas derivadas de la crisis sanitaria. Con los bonos, que dan derecho al baño tanto por la mañana como por la tarde, el acceso a las piscinas sale por apenas un euro al día.
El hecho de recalcar que el bono da derecho al baño tanto por la mañana como por la tarde no es casualidad, ya que una de las principales novedades de este verano es que las piscinas tienen la obligación de cerrar dos horas, entre las 14 y las 16 horas, para que se cumpla con el protocolo de desinfección, higiene y seguridad que impone el covid-19. Esta restricción se suma a otras que ya son conocidas por todos, como el uso del gel o la mascarilla al acceder a las instalaciones municipales. Las piscinas abren de martes a domingo, solo cierran los lunes, y el aforo se ha reducido, para las que se encuentran al aire libre, al 75%, lo que también contribuye a que se alcance el lleno.
Las restricciones obligan a cerrar las piscinas entre las 14 y las 16 horas para cumplir con el protocolo de limpieza de las instalaciones
«Pese a la gran afluencia de público la temporada se está desarrollando de forma tranquila, con un uso racional y sin grandes incidencias que resaltar. Por desgracia, todos nos hemos tenido que acostumbrar a las restricciones y se asume que se cierre un par de horas al mediodía», explica el concejal de Deportes, Vicente Alberola. En cuanto a las consecuencias de reducir el aforo al 75%, y pese al público que arrastran las olas de calor, no se está quedando gente fuera ninguna jornada, salvo algún domingo puntual. Con todo los ilicitanos tienen hasta ocho instalaciones a las que poder acudir: las de los barrios de Carrús, El Toscar, El Pla y Los Palmerales, las del Parque Deportivo y la ciudad deportiva de Altabix y las de las pedanías de Torrellano y El Altet.
Obras en Los Palmerales
Pese a que el polideportivo de Los Palmerales se encuentra en obras, los residentes en el barrio pueden seguir disfrutando de la piscina en verano. En esta instalación se cuenta con la figura del mediador para resolver posibles conflictos que surjan durante el baño. «Cuando me piden que recomiende una piscina, siempre apuesto por la de Los Palmerales, ya que es de las más tranquilas y en la que menos público se concentra», asegura el edil.
Lo que la pandemia impide hacer este año es uno de los rituales habituales de todos los veranos, en los que los usuarios acuden con bocadillos y refrescos para disfrutar del almuerzo en las instalaciones. Pese a ello, las piscinas son el mejor aliado ante el calor.
