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El Ayuntamiento recorta en siete años la deuda en 113 millones de euros

Elche paga 5,9 millones de euros a los bancos con el fin de contar con más gasto para los servicios públicos y para poder mantener los impuestos en 2022

La fachada del Ayuntamiento de Elche, en la Plaça de Baix

El Ayuntamiento de Elche acabará el año con una deuda de seis millones de euros, lo que habrá supuesto haber recortado en siete años (desde que PSOE llevara el mando con Compromís) 113 millones de euros el endeudamiento de las arcas municipales con los bancos. Es una de las grandes cifras de las que hoy ha sacado pecho el equipo de gobierno ha sacado pecho y ha atribuido a la "gestión brillante" de la Concejalía de Hacienda. PSOE y Compromís han dado luz verde este viernes a adelantar 5,9 millones de euros a las entidades bancarias, lo que supondrá liquidar tres importantes préstamos. Y esto se traducirá para el ciudadano, según ha explicado el portavoz del gobierno local, Héctor Díez, en que habrá más gasto ordinario en 2022 para los servicios públicos y los convenios con asociaciones de la localidad y también para mantener la presión fiscal.

Pese a la buena salud financiera del Ayuntamiento, tal y como ya avanzó el alcalde a comienzos de semana, el bipartito congelará los impuestos el próximo año bajo el argumento de "mantener los servicios y el escudo social a las familias más necesitadas", ha dicho Díez. El edil socialista ha vuelto a defender la premisa que en estos últimos años ha mantenido el ejecutivo local para negarse a una bajada de los tributos, como pide la oposición. "Reducir impuestos es recortar gastos y servicios", ha señalado.

Si bien, aunque los impuestos serán los mismos que el año pasado, el ejecutivo local sí que prevé que las arcas municipales puedan ingresar más por la recuperación económica tras los peores meses de la pandemia. Como por ejemplo, a través del impuesto de Construcciones y Obras, el de circulación y las tasas que pagan los ilicitanos por el uso de instalaciones municipales.

Por el momento, el único sector que se salvará de una exención de las obligaciones fiscales es el es la hostelería. Y es que, al menos para el primer semestre de 2022, el bipartito pretende que bares, restaurantes y cafeterías estén exentos de pagar las tasas por desplegar mesas y sillas en la calle, como han venido permitiéndoles desde que estallara la pandemia.

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