«Ponte en mi lugar». Con este lema, los conductores de los autobuses urbanos de Elche asistieron este miércoles a una jornada de trabajo muy diferente a la de su día a día. Recibieron una clase magistral sobre cómo circular cuando hay bicicletas cerca y aprendieron de primera mano lo que sienten los ciclistas cuando un vehículo de estas dimensiones les adelanta o cuando usan el claxon a pocos metros. También asistieron representantes de las dos asociaciones de taxis de la ciudad.
Y es que algo tan sencillo como que un autobús pite en la vía pública puede acabar ocasionando un accidente si hay un ciclista muy cerca. Por eso, una de las claves que los choferes del transporte público urbano tienen que seguir a rajatabla es que el pitido debe ser muy corto y nunca cuando estén pegados a un usuario de las dos ruedas, con tal de no ocasionale un susto y acabar desestabilizándolo. Así lo explicó a este diario la edil de Movilidad, Esther Díez, quien aseguró que esta jornada, que han organizado por vez primera surge, a raíz de una propuesta de la escuela de educación vial de la Policía Local.
Otras de las reglas de oro que han recordado los conductores del bus con esta actividad fueron las que la Dirección General de Tráfico (DGT) difunde para cualquier adelantamiento a ciclistas. La primera es esperar a que no venga nadie de frente, ni siquiera otra bicicleta. La segunda es reducir la velocidad. La tercera, traspasar la línea (aunque sea continua) y la cuarta, dejar al menos 1,5 metros de distancia lateral.
Con la pretensión de seguir mejorando el servicio de transporte público, los conductores de autobús urbano también se pusieron en la piel de las personas invidentes o con movilidad reducida que a diario se suben al bus. Un colectivo de usuarios muy importante, puesto que representa alrededor del 11% del total de clientes del transporte público urbano, según el Ayuntamiento.
De este modo, con los ojos tapados o en sillas de ruedas, los propios choferes simularon cómo se sienten estas personas cuando hacen uso del transporte urbano y las carencias que se encuentran en estos vehículos que, en líneas generales, han logrado recuperar el 80% de pasajeros que había antes de la pandemia.
