La violencia que se ejerce contra las mujeres en las redes sociales y los medios tecnológicos va en aumento. Los organizadores del I Congreso Internacional de Violencia Digital, finalizado ayer en Elche, aseguran que esta problemática se ha multiplicado por tres durante la pandemia. Detectar cuanto antes estos peligros y buscar rápidas soluciones es la mejor fórmula para evitar males mayores. Este es el motivo por el que la provincia cuenta ya con cuatro puntos de Atención Temprana a las Víctimas, puestos en marcha por el Observatorio Español de Delitos Informáticos (OEDI) en Elche, Villena, La Vila Joiosa y Bigastro, donde dan cobertura a una población que supera los 300.000 habitantes.
En lo que va de año, estos puntos de atención han atendido a más de cuarenta mujeres que han sido víctimas de este tipo de violencia digital. En el caso de Elche este servicio se puso en marcha a mediados de julio y en apenas dos meses ha dado cobertura a ocho mujeres. Del mismo modo, se han realizado cuatro informes periciales por forenses informáticos en los que se han rastreado en dispositivos tecnológicos software espía, mensajes amenazantes o de acoso, fotografías, vídeos, suplantación de perfiles y otro tipo de vestigios digitales. Por último, se han realizado 17 extracciones de datos de teléfonos móviles, redes sociales o contenidos almacenados en computación en nube.
El OEDI también ha elaborado informes con las estadísticas del resto de los municipios de la provincia en los que está presentes. En el caso de Villena, desde el pasado 25 de mayo hasta esta semana se han atendido catorce casos con víctimas, se han realizado diez informes judiciales, se han hecho 37 extracciones de datos y se ha prestado asistencia en dos juicios. En La Vila Joiosa, con estadísticas recogidas desde el pasado 2 de febrero, se ha atendido a trece víctimas, realizando diez informes judiciales, haciendo 23 extracciones de datos y asistiendo en un juicio. Por último, en Bigastro las estadísticas se están recogiendo desde el 11 de diciembre del año pasado y reflejan la atención a nueve víctimas, la realización de tres informes judiciales y la extracción de datos de 16 dispositivos tecnológicos.
Tomando otra vez a Elche como referencia, los informes elaborados por el OEDI muestran, por ejemplo, que el 75% de las víctimas de esta violencia digital son españolas, por el 25% restante de extranjeras. En cuanto a la tipología de delito, predominan las amenazas y coacciones, seguidas por los delitos sexuales y el acceso a las telecomunicaciones. A una distancia considerable ya se encuentran otros delitos, como los producidos contra el honor, el fraude informático y la interferencia en los sistemas.
«Hemos conseguido que la provincia se convierta en una zona pionera contra este tipo de delitos relacionados con la violencia digital. La atención temprana e integral resulta fundamental», analiza el presidente del OEDI, el ilicitano Salvador Samper.
