Dos nuevas escaleras del barrio de Los Palmerales desaparecerán en breve del paisaje urbano del barrio después de que el pasado lunes comenzaran los trabajos en la calle Llimoner. En marzo, el entonces responsable de la Conselleria de Vivienda, Rubén Martínez Dalmau informó, en una visita a Elche, de que ambos inmuebles desaparecerían y este mismo año, lo que se está cumpliendo con creces, aunque ya se venía anunciando desde 2019 por el Ayuntamiento. La decisión de demolerlos nunca es fácil cuando la Generalitat está buscando vivienda social para las familias con más necesidades.
La realidad es que la inversión para recuperarlas superaba con creces el hacer pisos nuevos, al tiempo de que algunos de estos estaban ocupados. De hecho, en aquella visita Dalmau dijo que las viviendas eran «irreversibles»; es decir, que estaban en «ruina económica» y no merece la pena más inversión pública, para justificar esta actuación.
El año próximo está previsto que otras dos escaleras contiguas, las número 25 y 27 de la calle Llimoner, también desaparezcan mientras que la Generalitat fía el futuro del barrio al plan ARRU, un programa de actuación que incluye áreas de regeneración y de renovación urbana en toda la Comunidad para la mejora urbana y de las condiciones de vida de sus residentes. La Generalitat también ha destinado un equipo de intervención en el barrio, dentro de otro proyecto, para un mejor control del reparto de la vivienda social que se está dando, para lo cual se está realizando un seguimiento de quiénes serían los beneficiarios.