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Cuando otros ojos te guían

Usuarios de la ONCE recorren un circuito en la Plaça Baix con perros de asistencia para visibilizar la importancia del animal

Exhibición de perros guía en Elche para sensibilizar

Exhibición de perros guía en Elche para sensibilizar J. R. Esquinas

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Exhibición de perros guía en Elche para sensibilizar J. R. Esquinas

La sensibilización es una de las mayores herramientas del ser humano para comprender a los demás. Las personas ciegas siguen sufriendo las barreras arquitectónicas y sobre todo cierta discriminación por parte de usuarios que no entienden, por ejemplo, que los perros guía no son mascotas cualquiera, si no que ayudan a usuarios con deficiencia visual severa a sentirse más autónomos, y sobre todo, seguros.

Pues bien, probablemente cualquier invidente haya sufrido a lo largo de su vida un capítulo de discriminación al entrar a algún establecimiento y toparse con que se le deniega la entrada a su perro guía, sin entender la importancia que éste tiene para la persona y sin entender que tienen reconocido en el país el derecho a acceder, acompañadas de este animal, a cualquier lugar.

Precisamente para erradicar este tipo de situaciones incómodas y desconocimiento, el consejo territorial de la ONCE en la Comunidad Valenciana organizó este jueves una exhibición de perros guía en la Plaça de Baix que corrió a cargo de la Asociación de Usuarios de Perros Guía de la Comunidad Valenciana (Aspegui CV) con motivo de los actos de la semana cultural del Grupo Social ONCE en Elche.

La plaza se transformó en un recinto con obstáculos por los que pasaron usuarios ciegos acompañados de los canes para representar cómo los perros de asistencia son capaces de identificar señales de obra, de peligro.

Para que los observadores se pusieran en la piel de ellos, además, se ofreció que los interesados entrasen a este circuito con los ojos vendados, del mismo modo que lo hicieron concejales del equipo de gobierno.

Hay que tener en cuenta que en la provincia cada año se reparten unos 20 perros guía, un centenar a nivel autonómico y unos 140 en todo el país. El proceso es bastante complejo y los solicitantes pueden llegar a esperar hasta cuatro años para que les concedan un perro de asistencia, teniendo en cuenta que la demanda es muy alta, hay listas de espera y también resulta muy costoso entrenar a uno de estos animales. Cada perro irá dirigido a un perfil muy concreto de persona, por lo que cada vez que un beneficiario de estos animales fallece, por ejemplo, el animal no podría ser perro guía de otra persona, por norma general, ya que los expertos entienden que es muy complejo que desarrolle un vínculo especial con más de una persona.

Desde la ONCE explican que el 3% de los beneficios con la venta de cupones van directos a la sección de la Fundación ONCE que se encarga de criar y entrenar perros guía, un proceso que llega a costar unos 35.000 euros por ejemplar ya que se necesitan un trabajo de adiestramiento que llega a oscilar entre los 20 y 24 meses, según apunta Vicente Galiana, presidente de Aspegui CV).

Enrique Llin Ruiz, presidente del consejo territorial de la ONCE en la Comunidad Valenciana recalca que es difícil acortar los tiempos de entrega «porque el perro lleva su proceso y no puedes sacarlo a la calle si no te da una plena seguridad».

De igual forma, apunta que no todos los ejemplares que empiezan a adiestrarse terminan sirviendo para este fin, de la misma forma que «el perro sigue aprendiendo toda su vida y si hay cariño y sentido común te lo adaptas a tu medio».

Los perros guía se inhabilitan a los doce años, por lo que los usuarios tienen que solicitar un nuevo perro, y los que ya tuvieron uno tienen prioridad, como ha sido el caso de José Antonio Mira, ilicitano que gracias a su compañero puede salir a la calle con confianza. «Voy a clases de música y cruzar la avenida es jugarte la vida. Reivindicamos semáforos sonoros. La ciudad necesita mejoras para el colectivo de invidentes», recalca al tiempo que recuerda que este verano, con la ciudad levantada por obras, se ha encontrado más barreras.

La Fundación ONCE trabaja con organizaciones como Club de Leones para entrenar también perros de América con tal de aumentar la disposición de ejemplares en España.

Es el caso de Liberty, una perro guía que desde hace nueve años le facilita el camino a Maite Blasco, de València, que le da todas las indicaciones en inglés. Admite que sigue faltando visibilidad porque en 2020 tuvo un altercado en una zapatería. «Me negaron la entrada con el perro porque no conocían la ley».

El concejal de Bienestar Social, Mariano Valera, tratando de hacer el recorrido con perro guía y los ojos vendados Antonio Amorós

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