La campaña de inspección y control de la granada mollar en establecimientos se desarrolló del 14 de octubre hasta el 3 de noviembre y terminó con 57 inspecciones en fruterías y verdulerías del casco urbano de Elche y las pedanías.
Un total de 12 agentes de la Unidad de Establecimientos y Actividad (UEAC) de la Policía Local procedieron a comprobar la documentación que acreditaba la procedencia lícita de los productos, con el objetivo de prevenir la sustracción y posterior venta ilegal de esta fruta tan preciada del Camp d´Elx que se encontraba en pleno periodo de recolección.
Durante la campaña se realizaron ocho inmovilizaciones de partidas de granada mollar de procedencia sospechosa, aunque más tarde se comprobó que el producto era lícito. Por otro lado, se levantaron 17 actas por ocupación indebida en vía pública de cajas de productos.
Los agentes facilitaron información a los comerciantes para avisar a la Policía Local en caso de que les ofrecieran granada mollar de dudosa procedencia.
Esta campaña ha permitido, además, una interacción muy estrecha con los propietarios de los establecimientos que ha propiciado un ambiente de colaboración muy positivo para la realización de futuras campañas.
Los policía también han incrementado la vigilancia a través de los controles móviles en la zona rural, donde se ha dado el alto a furgonetas para inspeccionar la mercancía que llevaban. La campaña de recolección de la granada mollar, que este año prevé recoger hasta 50.000 kilos. Una vez que los productores han recolectado y suministrado toda su mercancía, se ha dado por terminado el dispositivo especial de seguridad.
Las inspecciones que se han puesto en marcha responden a la llamada de Veïns Alerta, plataforma que agrupa a residentes del Camp d’Elx y que ha mantenido una serie de reuniones periódicas con la Policía y el Ayuntamiento en el último mes. En Veïns Alerta estiman que se ha producido el robo de más de 3.000 kilos de granada mollar, cultivada bajo el sello de la Denominación de Origen Protegido. Este es el motivo que lleva a los agentes a peinar fruterías, mercadillos y puntos de venta ambulante para inspeccionar que la fruta ha sido recolectada de forma correcta, y no arrancada de los árboles.
La mayoría de los robos denunciados se están produciendo por la noche, principalmente en las plantaciones que están localizadas al sur de la Vereda de Sendres, con furgonetas que se llevan entre 500 y 1.500 kilos.
