Una bala de nueve milímetros, disparada por un arma manipulada acabó con la vida de Yolanda, la joven paraguaya de 25 años, madre de dos hijos, que encontró la muerte en un piso de la calle Mangraner, en el barrio de Los Palmerales, en el que residía su pareja, menor que ella, de 22 años, que está siendo buscando por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado como supuesto responsable de lo ocurrido. Ayer se dieron cita en Plaça de Baix los responsables municipales y policiales, encabezados por la subdelegada del Gobierno, Araceli Poblador, para guardar tres minutos de silencio en memoria de la joven, asesinada en Navidad. En Alicante, también se guardó un minuto de silencio por la muchacha a las puertas del Ayuntamiento, así como en la Generalitat, en València.
Los investigadores guardan un escrupuloso silencio, así como el juzgado de Instrucción número 5 que ha declarado secretas las actuaciones. En cualquier caso, se trabaja con una única hipótesis, un caso de maltrato en el seno en una pareja que llevaba poco más de dos meses de relación. De hecho, la familia de la joven (la madre de la víctima y el hijo de esta, de 9 años) desconocían la relación, según ha podido saber el diario. La muerte se ha datado el día 25 tras la autopsia practicada en el Instituto Anatómico Forense de Alicante el pasado lunes. El cadáver presentaba un único impacto de bala, hecho a corta distancia y en el rostro. La bala quedó incrustada en él.
Fue la Policía Nacional la que tuvo conocimiento de lo ocurrido a través de una llamada y al desplazarse al domicilio, encontró la escena del crimen. La detonación aquella noche no despertó a nadie. Ahora los investigadores de balística tratan de identificar el arma, que probablemente estuviera manipulada para realizar un disparo certero. Todo hace sospechar que el novio, en un momento de arrebato, decidió acabar con la vida de la joven. Según confirmó el diario, tiene antecedentes por actos de violencia pero ninguno de gravedad. Para tratar de localizarlo, la Comisaría ha recurrido a sus familiares, que desconoce su paradero. Una fuente aseguró ayer que su padre reniega de él tras lo ocurrido. El hecho de que se trate de una persona joven y sin mucha capacidad para desplazarse, hace pensar que caerá pronto. Algunas fuentes apuntan a que minutos después de ocurrir el desenlace, tuvo un momento de arrepentimiento y se planteó entregarse.
«En nuestro país padecemos una epidemia de machismo criminal que acaba con la vida de mujeres inocentes y dejan a multitud de niños y niñas huérfanos», dijo ayer el alcalde de Elche, Carlos González, en la Plaça de Baix al término de los tres minutos en recuerdo de la joven. Más de un centenar de ilicitanos se congregaron para este acto. «La violencia de género vuelve a expresar su cara más brutal y más criminal», añadió el regidor. Mientras, Araceli Poblador explicaba que «las víctimas necesitan que pongamos voz a su silencio», siendo «intolerable» que en solo dos semanas se hayan producido dos feminicidios en la provincia. «Buscamos sin descanso a la persona que ha asesinado a Yolanda. Lo encontraremos, la Policía Nacional está trabajando sin descanso para detenerlo cuanto antes». En Alicante también hubo una condena unánime de la corporación, con el alcalde, Luis Barcala, a la cabeza. La vicealcaldesa, Mari Carmen Sánchez, lamentó el hecho de que «llevamos un diciembre negro, es la tercera vez que salimos a concentrarnos para condenar la violencia machista este mes por casos en Valencia, Torrevieja y ahora en Elche y esperamos que sea la última».
