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La subida del acero y el aluminio dispara el coste de un edificio de la UMH de Elche un millón más

La Valona, el nuevo inmueble que se levanta en el campus de Elche y que debe estar para verano de 2023, pasa de 5,8 millones a 7 por el incremento de las materias primas, la suma de nuevas partidas, rectificaciones y mejoras del proyecto

Las obras de La Valona, en el campus de Elche, marchan a buen ritmo. Antonio Amorós

La Valona, el edificio más cultural que tendrá el campus de Elche de la Universidad Miguel Hernández, va a tener un sobrecoste de más de un millón de euros. Y puede ser que más, en vista de cómo se han disparado los precios de las materias primas y el coste de la vida, con ese IPC cerca de los dos dígitos.

Ese incremento de coste, que recientemente se ha anunciado en la plataforma de licitación, corresponde en realidad a tres motivos. Uno de ellos obedece al aumento del coste del acero y del aluminio.

Desde el Rectorado se explica que la actual empresa constructora, que quedó en un principio en tercer lugar, desde que presentó su oferta hasta que se pudo firmar el contrato vio cómo transcurrían cinco meses. En ese tiempo, desde diciembre del año 2020 hasta mayo de 2021, el coste de las materias primas se disparó, generando un sobre coste de 320.000 euros, a lo que cabe añadir el beneficio industrial y el IVA.

A este motivo se le suma un segundo, como es el hecho de introducir partidas no contempladas y rectificaciones. Así por ejemplo, fue necesario incluir cimentaciones de una rampa, otras instalaciones o, por ejemplo, asumir el cambio de decisión de que la tierra que se extrajera del solar, en lugar de revertir en el propio campus, se llevara a un gestor de residuos. Esta segunda parte, de nuevas cargas y defectos del proyecto, se traducía en un nuevo aumento del coste en 290.000 euros, sin contar ni el beneficio industrial ni el impuesto sobre el valor añadido.

Por último, en tercer lugar, a raíz del covid y por lo que pueda pasar en un futuro, se optó por hacer algunos cambios de uso y prestaciones en el diseño del edificio, como por ejemplo la decisión de instalar un montacargas, que no estaba previsto inicialmente, o contar con aulas al exterior. Este tercer elemento suponía incrementar en otros 240.000 euros (sin contar el beneficio ni el IVA de nuevo) el coste de la obra.

El caso es que al final, por diversos motivos, la obra va a costar un millón de euros más de lo inicialmente previsto

Así las cosas, este inmueble, que se está levantando en la confluencia de las avenidas de la Unesco y de la Universidad, en lugar de suponer 5.883.860 euros va a costar 7.003.564 euros, es decir 1.119.703 euros más.

Cinemateca y diversas salas de exposiciones, además de la Escuela de Doctorado, siete aulas y, posiblemente, una cafetería o restaurante con vistas, serán algunas dotaciones de este edificio que se empezó a levantar en noviembre del pasado año y que en principio se iba a llamar Ágora Cultural.

El mismo contará con 5.000 metros cuadrados repartidos en cinco plantas y un sótano, en el cual se pretende almacenar piezas del patrimonio de la Universidad. También contará con distintas terrazas. La idea es que esta construcción, que seguramente pasará a ser uno de los edificios más llamativos no solo del campus, sino de todo Elche, se pueda estrenar en el verano de 2023 tras 18 meses de obras.

El 3 de agosto de 2020 se anunciaba la licitación de este edificio, el cual, no obstante, podría volver a experimentar una actualización de su coste en el caso de la empresa adjudicada pudiera acogerse a los últimos decretos estatales sobre obra pública que recogen una modificación de precios en función de unos índices de materias primas, como por ejemplo el cobre y el cemento y siempre que se pueda justificar más de un 5% de sobrecoste.

Con estos recientes reales decretos, además de La Valona también se podrían no respetar los precios iniciales de adjudicación en el caso del edificio departamental en el campus de Elche, que se tuvo que paralizar su construcción y que en principio se retomará en breves semanas; el edificio Mascarat en Altea, y cuya acta de replanteo debe tener lugar tras Semana Santa; y otra pequeña obra en Orihuela, que también podría estar sometida a una posible revisión de precios en parte también a la actual situación generada en Ucrania.

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