Alerta en Elche tras la visita de los cacos a las iglesias de La Hoya y El Altet para robar las recolectas y donativos. La Policía investiga la autoría de los dos robos producidos en la madrugada del pasado jueves al viernes, cuando ambos templos estaban cerrados. Los ladrones consiguieron llevarse la recaudación de los lampadarios y, en el caso de la parroquia de San Francisco de Asís de El Altet también robaron los donativos de Cáritas.

Los amigos de lo ajeno se ensañaron con las puertas para acceder a los templos. En El Altet forzaron la cerradura de la puerta que da acceso al local que tiene Cáritas, contiguo a la parroquia, logrando acceder al interior. Allí rompieron varios cajones antes de entrar en la sacristía donde los cacos robaron los casi 700 euros en monedas que había en unas bolsas, la recolecta de varios días de Cáritas y la recaudación de los lampadarios, los muebles con lámparas o velas que se encienden como ofrendas. Allí guardaba el dinero el párroco preparado para llevarlo ese viernes a la oficina bancaria de Torrellano, tras el cierre de la que tenía más cercana. "Para esta parroquia es un dineral", lamenta Alfonso Rodríguez, delegado de Cáritas en El Altet, quien recuerda que ese dinero era para los más necesitados y para el mantenimiento del templo. Los ladrones, que accedieron a la sacristía desde el local de Cáritas, también abrieron los cajones donde se encuentran las llaves de los coches, aunque finalmente no se las llevaron ya que los vehículos no se encontraban allí. Lo que sí que sustrajeron, además, es una valiosa pluma estilográfica, la que se usa para firmar los expedientes matrimoniales, siente Rodríguez que espera que el seguro se haga cargo.

Los mayores destrozos los produjeron en el local de Cáritas tras forzar la puerta y varios cajones. Tras la pertinente denuncia, la Policía tomó huellas aunque aún no se ha conseguido localizar a los ladrones. No es la primera vez que este templo parroquial sufre un robo. Hace varios años unos ladrones, tras forzar las puertas con palancas, entraron a la parroquia y se llevaron, entre otros objetos, varios décimos de Lotería de Navidad.

Parroquia de San Francisco de Asís en El Altet Antonio Amorós

No fue la única iglesia que visitaron los cacos esa misma madrugada, y no precisamente para rezar. Con el mismo modus operandi, los ladrones accedieron a la parroquia de San Antonio de Padua, donde forzaron la cerradura de una de las puertas, desenroscándola. Tras conseguirlo, accedieron al interior donde se dirigieron a los lampadarios. Allí consiguieron arrancar el cajón con la recaudación, que las fuentes consultadas no supieron concretar. Aunque intentaron entrar en la sacristía, finalmente desistieron de hacerlo. Tampoco se llevaron ninguno de los objetivos que hay en la interior, ni ninguna de las imágenes religiosas, tras deambular por el interior del santuario. Al haber sucedido el robo en la madrugada, no hay testigos que vieran quién entró en la parroquia, aunque la Policía también lo está investigando.

La alcaldesa pedánea de La Hoya, Alicia Molero, no recuerda que antes de ese robo se hubieran producido otros en ese templo parroquial y elogia la labor de la plataforma Veïns Alerta, donde un centenar de colectivos y entidades que agrupan a vecinos del Camp d’Elx colaboran con la Policía en la vigilancia de las pedanías. "Hacía mucho tiempo que no escuchábamos que se había producido un robo en la zona", asegura Molero. La próxima semana, precisamente, miembros de la plataforma mantienen una reunión con el gobierno municipal y con la Policía Local en La Hoya para tratar la mejora de la seguridad en las pedanías. "La plataforma está funcionando muy bien, los avisos también", señala la alcaldesa pedánea.

Su homólogo en El Altet, José Manuel Meseguer, comparte su opinión. "Últimamente estamos más tranquilos en cuanto a robos", señala Meseguer. No obstante, en esta pedanía, el pasado miércoles se produjo un asalto con violencia en una vivienda. Los asaltantes entraron al sótano y amenazaron a la propietaria del inmueble, a quien le robaron el dinero que tenía en la casa. La víctima denunció que se trataba de unos individuos españoles que iban con mascarillas para ocultar parte de su rostro.

En esta pedanía también están muy contentos con los resultados de Veïns Alerta ya que se han evitado robos por su intensa vigilancia, en coordinación con las fuerzas de seguridad. Todo, tras la oleada de asaltos que las pedanía ilicitanas sufrieron durante el pasado verano y otoño. Los vecinos avisan a través de WhatsApp cada vez que ven a alguien o un vehículo sospechoso, y alertan a las patrullas, como es el caso de la recién creada Unidad Rural de Elche con una docena de agentes de la Policía Local dedicados a vigilar las pedanías ilicitanas.

El portavoz de Veïns Alerta, Vicente Bordonado, señala que no hay preocupación vecinal por los robos porque se trata de casos aislados. Bordonado pone en valor la efectividad que está teniendo la plataforma a la hora de evitar asaltos en las pedanías. "Se está haciendo un gran trabajo de colaboración ciudadana junto con la Policía Local, la Policía Nacional y la Guardia Civil y estamos teniendo reuniones estas últimas semanas donde estamos muy contentos con los resultados", explica el portavoz de una plataforma que forman algo más de un centenar de colectivos.

Desde el Obispado de Orihuela-Alicante, por su parte, aseguran tampoco estar preocupados por estos robos en parroquias y no tienen constancia de que haya habido en otros puntos de la provincia.