El equipo de gobierno de Elche, de PSOE y de Compromís, han decidido elaborar una ordenanza de prevención y de control de los mosquitos. Una plaga que está resultando cada vez más molesta de atajar en la ciudad por los fenómenos intensos de lluvias cada vez más frecuentes. El ejecutivo local ha dado este viernes primero someter a consulta pública un borrador inicial, que todavía no se ha hecho público, para recabar opinión de particulares, profesionales y organizaciones más representativas que puedan estar potencialmente afectadas por la futura norma. Sin dar todavía muchos más detalles sobre el alcance de esta curiosa regulación, el portavoz del gobierno, Héctor Díez, ha señalado que la intención es crear un mapa de afección del insecto para llevar a cabo una mejor prevención y solucionar los problemas que genera esta plaga, como son enfermedades. El edil socialista ha reconocido que como toda ordenanza, habrá posibles sanciones, aunque todavía están por definir ya que está en un estado muy incipiente. Los problemas no están tanto en los particulares, sino en grandes explotaciones que puedan tener agua embalsada y puedan provocar focos.

Según el representante del equipo de gobierno, esta iniciativa surge, además, en consonancia con la Federación de Municipios y Provincias que está promoviendo dentro de las distintas localidades de la Comunidad este tipo de normativas.

El Ayuntamiento como promotor local de la sanidad ambiental "se considera un eslabón fundamental de la cadena de responsabilidades para la prevención y el control de mosquitos". Así lo señala la moción aprobada por los responsables municipales que añade, además, la necesidad de contar con una ordenanza que regule la prevención y el control de los mosquitos como "instrumento normativo directo, práctico y eficaz que se adapte a las exigencias de control de esta plaga". Con ello, durante 20 días, la Administración local pretende recoger opiniones sobre los problemas que se pretenden solucionar con la iniciativa, la necesidad y oportunidad de su aprobación, los objetivos de la norma, y las posibles soluciones alternativas regulatorias y no regulatorias.

Precisamente, esta semana, el Ayuntamiento ilicitano ha tenido que volver a pedir la colaboración vecinal para tratar de reducir los mosquitos que tantas quejas desatan en algunas zonas del municipio. Junto a la empresa encargada de las labores de fumigación en el municipio, CTL Sanidad Ambiental, han iniciado una campaña de concienciación ciudadana para lograr atajar la proliferación de mosquitos, coincidiendo con la estación primaveral y ante la llegada de las altas temperaturas. La lucha contra estos insectos está resultando muy complicada este año. Ya en abril, el equipo de gobierno anunció que tenía que reforzar los esfuerzos para controlar las plagas tras las últimas lluvias, que se han acentuado sobre todo en humedales y saladares. El nuevo dispositivo, de 15 equipos de refuerzo, incorpora un nuevo dron más pequeño que se suma a otro de mayor tamaño y está compuesto por un cañón nebulizador, tres cañones pulverizadores, una zodiac, una moto eléctrica y un quad.

La concejala de Sanidad, Mariola Galiana, y la concesionaria del servicio han solicitado ahora, a las puertas del verano, la colaboración ciudadana para que actúen en propiedades privadas, lugares donde la empresa no puede acceder. En el caso de los vectores como los mosquitos, piden que se vigile especialmente las piscinas, pero también embalses, charcos, bidones, neumáticos, maceteros y recipientes en general, ya que las larvas de mosquito se crían en estos puntos. En el caso de las piscinas, se debe clorar y en el caso de localizar esos pequeños charcos se deben secar, verter lejía o cubrir con mosquiteras. Además, se incluye un vídeo con recomendaciones para evitar los focos de cría, que estará en constante movimiento en las redes sociales del Consistorio.