Lograr que una ciudad como Elche logre ser autosuficiente en una década a través de la implementación de placas solares en el ámbito privado y público. Ese es uno de los principales retos que se debatieron ayer en el Centro de Congresos en la primera jornada «Elche Solar».

El encuentro estuvo impulsado por la empresa Demesol y contó con la colaboración de la Universidad Miguel Hernández de Elche. A lo largo de varias mesas de expertos intervinieron ecologistas, colectivos agrarios como Asaja, CC OO, representantes vecinales y de colectivos empresariales como Cedelco, concejales de la corporación municipal y expertos en energía solar, entre ellos docentes de Ingeniería Eléctrica de la UMH y de la Universidad de Alicante, para tratar de abordar desde varias aristas qué pasos se deberían dar para migrar progresivamente hacia el modelo de energía solar fotovoltaica.

Demetrio López, gerente de la firma organizadora y profesor del área de Ingeniería Eléctrica de la UMH, resalta que es importante que se publicite la energía solar para que pueda producirse un cambio, aunque reconoce que la implementación se ha notado «muchísimo» de unos años a esta parte.

Destaca que sólo a nivel formativo han notado que cada vez hay más alumnos interesados en formarse en este mundo y que han cumplido con éxito ya en la universidad trece ediciones del curso de autoconsumo.

Por otra parte, entiende que se está dando un «sentimiento de base que debemos funcionar más con energías limpias». De igual forma, entiende que la subida del precio de la luz y los conflictos en Ucrania han activado el interés por estas fuentes de energía para no tener dependencia.

Señalan los expertos que el cambio de modelo se está produciendo ya que no sólo se instalan estas placas los particulares en casas unifamiliares, si no que cada vez hay más comunidades de vecinos que optan por instalar estas plantas fotovoltaicas en las terrazas de los edificios.

En cuanto al desarrollo de plantas generadoras para vender la energía, los expertos señala que es una cuestión que va más lenta, pero hay previsión de que empiece en el corto plazo el despegue.

Hay que tener en cuenta que el objetivo nacional es llegar a 2030 con una penetración que permita que el 42% del consumo de energía final del país y el 74% de toda la generación eléctrica sean de origen renovable. Ésa, al menos, es la hoja de ruta marcada por la Ley de Cambio Climático.

De igual forma el experto explica que existen varios tipos de ayudas para poder contar con esta tecnología, ya que por ejemplo hay ayuntamientos que bonifican el IBI y hay descuentos en la tributación a nivel autonómico, además de ayudas directas.