La Concejalía de Fiestas se ha quedado de nuevo sin asesor este año, después de que el anterior renunciara a su cargo en el mes de febrero. El funcionario de empleo que fichó la edil del área Mariola Galiana tras la salida de su antecesor, Joaquín Martínez (también presidente de la Junta Mayor de Cofradías y Hermandades de la Semana Santa) se ha marchado del Ayuntamiento «por motivos propios», según el equipo de gobierno. Lo ha hecho cuando queda un mes y medio para terminar de programar los actos de más peso para este departamento y más esperados desde hace tres años que son las fiestas patronales de agosto.
Pedro Galiano, graduado escolar y persona muy ligada a los festejos populares, ha renunciado a un sueldo anual de 37.976 euros cuando estaba a punto de cumplir sus cinco primeros meses como personal de confianza de la edil socialista.
El asesor llevaba más de veinte años colaborando con la organización de las fiestas populares, tanto en la Federación de la Gestora de Festejos Populares como en la Comisión de Fiestas de Altabix, de la que es vicepresidente. Desde hace más de diez años colabora con la Junta Mayor de Cofradías en la organización de la Semana Santa ilicitana.
En declaraciones a INFORMACIÓN, el que fue la anterior mano derecha de Galiana, Joaquín Martínez, aseguró en febrero que quería comenzar una nueva etapa en su vida. Economista de profesión, aunque ligado a la política de forma directa desde hace tres mandatos, dice tener varias ofertas profesionales sobre la mesa pero ninguna sin concretar. Algunas fuentes próximas a la Alcaldía aseguraron que se iba muy cansado del trabajo que tenía que desempeñar en Fiestas, un área que, curiosamente, apenas ha tenido gran actividad durante los dos últimos años por culpa de la pandemia