El veterano cantante Loquillo no defraudó a sus fans. En su concierto anoche en Elche, en la barraca municipal ubicada en el parking de la Universidad Miguel Hernández, venció y convenció. Sus temas clásicos, junto a nuevas composiciones, encandilaron al respetable, en su mayoría de edades entre los 40 y los 50 años y que vivieron en los años 80 el apogeo de la que fue su banda, entonces Loquillo y Los Trogloditas.
Fiel a sí mismo, José María Sanz Beltrán hizo disfrutar a los presentes en una noche cargada de emociones y muchas ganas de rock and roll.
Con una puesta en escena acertada y una potente banda en sus flancos, Loquillo hizo disfrutar al público que, respetuoso y agradecido, aplaudió y vitoreó cada uno de los temas del cantante.
La personalidad de Loquillo inundó el recinto y su música, eterna, hizo rememorar a muchos sus tiempos de juventud, además de degustar algunos de los temas con la perspectiva que da la experiencia de la vida.
Sonido espectacular, una canción que interpreta con Alaska, Rey del Glam, y que no suele interpretar, Loquillo, en una entrega de casi dos horas, derrochó elegancia, en un recinto enorme pero lleno hasta la mitad.
Con temas de Patty Smith y Elvis, el cantante demostró además que es capaz de reunir a varias generaciones.
Tras Loquillo, que cerró con Cadillac Solitario, actuó otra banda mítica, OBK, todo ello ya bien pasada la medianoche.
Para esta noche de martes está prevista la actuación de otra estrella de la música española de los 80, Rafa Sánchez, del mítico grupo La Unión. A las 22 horas de hoy se abrirán las puertas y el concierto, en este caso en el Hort de Baix, está programado a partir de las 23.30 horas
