El cielo de Elche se volverá a iluminar mañana tras dos años de parón con un espectáculo pirotécnico que aspira a ser más vistoso que en cualquier otro año. La Nit de l'Albà regresa con más fuerza y más puntos de disparo, y será el primer año como Fiesta de Interés Turístico Nacional. En total se lanzarán 64.000 cohetes, entre las que habrá 800 carcasas de colores como novedad; y 520 palmeras.

Todo ello repartido a lo largo de 22 puntos de la ciudad, siete más que en 2019, ya que llegará a barrios como Carrús, Altabix y Sector V. En total se lanzarán 6.000 kilos de pólvora, de los cuáles 2.800 serán por impulso municipal y 3.200 a través del lanzamiento de los ciudadanos, según ha explicado este viernes el alcalde, Carlos González, desde la terraza del Ayuntamiento desde donde operarios de la pirotecnia Ferrández está ultimando detalles del montaje.

Esta familia de pirotécnicos lleva tres décadas encargada de la Palmera de la Virgen, que representa el momento más mágico e icónico cuando llega la medianoche. Tal y como ha matizado Fernando Ferrández, uno de los montadores, el habitáculo de Santa María es el que es y la Palmera no puede crecer, aunque cada año tratan de pulir más las palmeras para ganar en vistosidad y que, incluso, pueda permanecer algo más de tiempo en suspensión.

El alcalde, Carlos González con los ediles Esther Díez, Felip Sànchez y Mariola Galiana este viernes Matías Segarra

Este año los esfuerzos se han puesto en que se alcancen los 25 segundos, dos más que en la última ocasión, "desde que sube (a unos 300 metros de altura y un radio e 700 metros), se rompe y llega el 'llorado', vamos a tratar de que dure lo máximo posible", indicaba el pirotécnico mientras destacaba que la tradicional palmera de color perlado está compuesta de 1.300 cohetes, unos 100 kilos de pólvora en total que se rellenan de forma artesanal.