Elche produce, nada menos, que 12.800 toneladas de lodo al año. Una ingente cantidad que ha dejado, incluso, pequeña a la depuradora de Algorós, la más grande la ciudad. Esta EDAR se remodelará integralmente con un proyecto de 50 millones de euros que permitirá eliminar los principales problemas de la actual infraestructura, con 40 años de antigüedad, renovar los procesos de tratamiento, aumentar la reutilización y la eficiencia energética de la planta, así como mejorar su integración paisajística.
Actualmente, la empresa de gestión mixta Aigües d’Elx no dispone de los medios necesarios para llevar a cabo el trabajo de carga, transporte y gestión de tal cantidad de lodos deshidratados. Es por ello que se ve obligada a externalizar este servicio. Así, acaba de sacar a licitación por 1.083.195 euros, más IVA, estos trabajos, con un contrato de cuatro años (dos años y otros dos prorrogables), lo que supone un presupuesto anual de 270.798 euros.
La empresa mixta apuesta, además, por la economía circular en la gestión de aguas residuales de Elche, que se pueden convertir en agua para riego, fangos para fertilizantes agrícolas o biogás.
La línea de fangos de la depuradora está formada por un conjunto de procesos a los que se somete a los lodos producidos en la línea de agua. Estos pueden ser reutilizados, bien en aplicación agrícola como fertilizante y abono, o bien como valorización energética en forma de biocombustible (por ejemplo, para grandes hornos en cementeras) o ser depositados en un vertedero, en caso de no ser aptos para su reutilización.
En Elche, la producción media anual de lodos es de 12.884 toneladas, 10.338 en Algorós, 2.098 en Arenales y 448 toneladas en Carrizales, las tres depuradoras que hay en la localidad. El destino final del fango deshidratado es el de la aplicación agrícola, donde es reutilizado en su totalidad como abono y fertilizante.
Tratamiento
El tratamiento de fangos en las estaciones depuradoras de aguas residuales tiene un impacto muy significativo en los costes económicos y operativos de las EDAR. Por ello, una de las medidas para obtener una mejor eficiencia en la gestión es reducir al máximo el volumen de fango producido, ya que cuanto menor sea, más pequeño será el coste de la gestión y transporte de este producto.
Para conseguir bajar el volumen de fango generado, el principal medio es reducir el porcentaje de agua que le acompaña y, para ello, se aplican tecnologías para el espesamiento y deshidratación de dichos fangos. En este sentido, el estado final del fango deshidratado en las EDAR de Elche, tras el paso por la línea de fangos, es de una sequedad promedio al 21%.
En el caso particular de la EDAR de Algorós, entre las fases de espesado y deshidratado en la línea de fangos, se realiza una «digestión anaerobia», donde parte del lodo es digerido (reduciendo su volumen) y convirtiéndose en biogás (con un 65% de metano).
Este biogás es almacenado en un gasómetro y es utilizado para la producción de energía eléctrica por medio de un sistema de cogeneración, que se usa para el propio autoconsumo de la depuradora, que cubre el 35% de la demanda eléctrica de la instalación, 2,66 GWh/año de energía producida.
Durante el pasado año se regeneraron 9,7 hectómetros cúbicos de aguas residuales entre las tres depuradoras que hay en el término municipal de Elche. La principal EDAR es Algorós, que trata el 82,4% de las aguas residuales que se generan en el municipio, principalmente procedente de las aguas del casco urbano; Arenales del Sol trata el 14% de las aguas residuales procedentes de El Altet, Arenales del Sol, Torrellano y el parque empresarial; y la depuradora de Carrizales es la menor, con un peso del 3,6% del tratamiento total de las aguas del municipio.
En el caso de Elche, el agua regenerada se reutiliza el 100%, el 87,6% (8.555.615 m3) para riego del Camp d’Elx, a través de las comunidades de riego tradicional como las acequias de Marchena, Mayor del Pantano y Azud de los Moros, así como los regantes de Carrizales, o para huertos tradicionales de palmeras como el de Contador y Tío Massot. Desde la depuradora de Arenales se destinan 1.206.712 m3 para uso ambiental, mantenimiento de las charcas o riego del vivero.
Control de vertidos
Un elemento que facilita la reducción de la contaminación de las aguas residuales es el plan de control de vertidos que lleva a cabo Aigües d’Elx. El objetivo del control es asegurar el correcto funcionamiento de la EDAR mediante la vigilancia de los vertidos que las industrias ubicadas en el término municipal de Elche realizan al alcantarillado y que estos cumplan la legislación vigente y las ordenanzas municipales.
Gracias a estos trabajos y al cumplimento de las ordenanzas por parte de las industrias ilicitanas, favorece que no haya impactos negativos en el entorno, y permite la reutilización del efluente de riego, así como la disposición de lodos de uso agrícola.
