Una de cada tres personas tendrá problemas para tragar alimentos y líquidos a partir de los 65 años

Especialistas del Hospital General de Elche alertan de la alta prevalencia de la disfagia y lamentan que está infradiagnosticada / Una jornada visibiliza la enfermedad y da consejos para evitar atragantamientos, además de elaborar platos para disfágicos

Hospital General de Elche celebra unas jornadas sobre el Día Mundial de la Disfagia

Tony Sevilla

Rubén Míguez

Rubén Míguez

El 30% de las personas mayores de 65 años padecen disfagia, una enfermedad que dificulta e, incluso, impide, tragar alimentos y líquidos a quienes la sufren. De hecho, la disfagia afecta a casi un 10% de la población, porcentaje que se eleva a una de cada tres personas en el caso de las mayores de 65 años, sin tener patologías previas, ya que con ellas el número es aún mayor. «A pesar de ser una enfermedad muy prevalente, es muy desconocida porque no se diagnostica convenientemente puesto que las personas que la sufren lo hacen en silencio», lamenta Mercedes Navarro, enfermera de la Unidad de Neurología e Ictus del Hospital General de Elche. 

El Hospital General Universitario de Elche se ha sumado a la celebración del Día Mundial de la Disfagia, una enfermedad que, quien la padece, tiene dificultad para tragar y que está relacionada con múltiples patologías, incluso respiratorias. En el centro hospitalario han querido dar visibilidad a esta enfermedad que, como denuncian los especialistas, está infradiagnosticada ya que, sobre todo en la población mayor, se normaliza el no poder deglutir ciertos alimentos, cuando en esos casos se debe consultar siempre con un médico.

El porcentaje de personas mayores de 65 años que sufren esta enfermedad se eleva hasta el 60% en el caso de quienes están en residencias, hospitales de día y geriátricos. "Casi siempre está relacionado con el estar mucho tiempo en cama y con lo problemas que genera la soledad y el aislamiento social, y se agudizan estos problemas en estas personas, al apartarles de su entorno, de su casa", explica Navarro.

La prevalencia de disfagia no conocida es muy alta, mayormente en personas con dependencia y con enfermedades neurológicas y degenerativas. La dificultad para tragar o disfagia aumenta en Navidad entre mayores y pacientes con ictus, según los expertos.

La disfagia es la sensación de dificultad de paso del alimento desde la boca hasta el estómago. Cualquier anomalía en cualquiera de las fases de la deglución puede ocasionarla. La deglución es una función básica, de las más primitivas presentes en los animales, y es fundamental para la nutrición y asegurar así la supervivencia de las especies.

Es, por ello, que una alteración en la deglución puede tener gran impacto en el desarrollo y en la calidad de vida, y puede llegar a ser responsable de consecuencias nutricionales o complicaciones graves como el paso del alimento a la vía respiratoria. De esta forma, puede provocar una broncoaspiración que ocasiona frecuentes infecciones respiratorias y neumonías, con consecuencias muy graves para la salud. De este modo, genera carencias nutritivas, desnutrición o deshidratación, porque la persona no está comiendo los alimentos que necesita. En los casos graves se dan neumonías al desviarse el alimento o líquido o su saliva a la vía aérea en lugar de a la digestiva. "Lo que nosotros estamos viendo es que cuadros de desnutrición y de infecciones respiratorias en personas mayores, lo más probable es que detrás de esos cuadros esté la disfagia", explica Mercedes Navarro.

En la mayoría de los estudios poblacionales, la prevalencia de disfagia se sitúa en torno al 10% lo que supone un síntoma frecuente en la población. Los pacientes con enfermedades neurodegenerativas, enfermedades cerebrovasculares y los ancianos frágiles constituyen los colectivos más vulnerables para padecer disfagia.

Hay datos sobre disfagia orofaríngea en diferentes enfermedades neurológicas pudiendo afectar al 30% de los pacientes que han padecido un Accidente Cerebro Vascular, al 52–82% de los afectados de enfermedad de Parkinson, al 60% como síntoma inicial de una enfermedad lateral amiotrófica (ELA), al 40% de los pacientes con miastenia grave, al 44% de las esclerosis múltiples, hasta al 84% de los pacientes con enfermedad de Alzheimer (EA) y al 25–42% tras un traumatismo craneoencefálico.

Síntomas

Para detectar una disfagia leve o moderada hay que fijarse en síntomas como notar que después de comer ciertos alimentos la persona tiene tos o ronquera, o se queda la comida en la garganta sin poder deglutir, tiene babeo o no sella bien los labios al comer. "El problema es que no le dan importancia a esto, lo normalizan y comen otras cosas sin ver que tienen una enfermedad que puede suponer un atragantamiento si no se acude a terapia", indica la especialista de la Unidad de Neurología del Hospital General de Elche.

Otra consecuencia es el aislamiento social. "Dejan de hacer cosas que antes hacían, rechazan ir a comer con los hijos o familiares por vergüenza de no poder comer lo mismo que ellos o por temor a no poder tragar bien un plato que hayan hecho", señala la enfermera.

Uno de los platos elaborados.

Uno de los platos elaborados. / TONY SEVILLA

La jornada ha contado con la participación de asociaciones de pacientes, como la Asociación de Familiares de Personas con Alzheimer de Elche o la Asociación de Parkinson de Elche. "El 50% de las personas que sufre Parkinson tiene disfagia", explica la logopeda de la Asociación de Parkinson de Elche, Paloma Terrés. "En logopedia, les enseñamos algunas maniobras protectoras y recomendaciones para trabajar en casa", explica, entre las cuales está el permanecer erguido a la hora de comer. "Tienen mala coordinación a la hora de masticar, de mover la lengua y llevar el bolo alimenticio hacia atrás, y si se va el alimento a las vías respiratorias genera infecciones e, incluso, neumonía", añade la logopeda.

Los pacientes, eso sí, se ven abocados a acudir a un logopeda privado o a una asociación para tener este servicio que no cubre la sanidad pública. "Es un déficit del sistema sanitario, que debería contar en todos los centros con un logopeda en unidades como esta ya que son fundamentales para rehabilitar la disfagia y enseñar técnicas de deglución para evitar los atragantamientos en estos pacientes", denuncia Mercedes Navarro.

Menús

El acto ha contado con la participación de profesores y alumnos del ciclo de Hostelería del IES Cap de l’Aljub de Santa Pola, que durante toda la jornada han realizado una demostración en vivo de texturización de alimentos y adaptación de recetas a cargo de los profesores Joaquín Caro y Salvador Góngora. "Se pueden hacer menús y platos igual que los que tiene cualquier restaurante o en casa, y comer lo mismo que los familiares o amigos", señala Caro.

Así, en esta ocasión han elaborado platos texturizados, usando diferentes ingredientes como espesantes, entre ellos tapioca o harina de arroz, o con los propios alimentos que hacen esta función, como es el caso de las galletas para preparar un café con leche con ellas, todo triturado.

Entre los platos, han elaborado tortilla triturada con nata, crema de verdura, albóndigas trituradas con puré de patata y salsa de tomate, pescado con arroz, manzana asada con magdalenas, todo texturizado, o flan triturado. "Los espesantes absorben la humedad y le dan cremosidad, es importante que los alimentos estén cremosos para que no se ahoguen", indica Góngora.

Los platos que se prepararon.

Los platos que se prepararon. / TONY SEVILLA

El objetivo es que quienes sufren de disfagia, sobre todo personas mayores y quienes tienen ciertas patologías, no se sientan aislados por tener que comer algo distinto al resto de su familia o eviten ir a reuniones sociales en casas y restaurantes por este problema. "Queremos evitar el aislamiento social del paciente, cuando va a un restaurante no entienden lo que necesita y la comida se hace muy monótona, o en casa, que se piensa que con triturarlo todo está listo, pero con un poco de atención y trabajo pueden hacer platos que, a nivel degustativo y visual, son más atractivos", explica Caro.

Mesas

Profesionales del hospital han organizado tres mesas informativas destinadas a los ciudadanos.

En la primera de ellas se ha hablado de "disfagia y problemas neurológicos" a cargo de Mercedes Navarro, enfermera de la Unidad de Hospitalización de Neurología, del doctor Luis Marhuenda-Bermejo, neurólogo, Vanesa Baeza, fisioterapeuta del Servicio de Rehabilitación, Jaime Pomares enfermero de la Unidad de Hospitalización a Domicilio y Paloma Terrés, logopeda de la Asociación de Parkinson de Elche.

La segunda mesa ha llevado por título "Disfagia e I+D+i" y ha contado con la participación de Nuria Franc, una joven paciente que normaliza la situación a través de la red Tik-Tok, que ha participado mediante videoconferencia. También han colaborado Patricia Martínez, de Fomento de la I+D+i del programa TOTS de FISABIO, Keila Pérez, profesora de Cocina y Gastronomía del I.E.S. Cap de l’Aljub, Javier Navarro, fisioterapeuta de Vegenat Healthcare, compañía especializada en diseño, desarrollo, comercialización y distribución de productos de nutrición y dietética, y Erika Calle, logopeda especialista en atención temprana de la Clínica ALMA+salud de Elche.

Los platos se texturizan y se sirven con una manga, como este pescado blanco.

Los platos se texturizan y se sirven con una manga, como este pescado blanco. / TONY SEVILLA

Por último, la tercera mesa, denominada "Disfagia y Salud Mental", ha contado con la presencia de la doctora Esther Ortega, Terapeuta Ocupacional del Servicio de Psiquiatría del Hospital General de Elche, Isabel Llinares, psicóloga y vicepresidenta de la Asociación de Familiares de personas con Alzheimer y otras demencias de Santa Pola, Natividad Dolores Sarmiento, enfermera de la Unidad de Salud Mental de Altabix, Keila Pérez, dietista y Beatriz Villacampa, farmacéutica de Atención Primaria del Departamento de Salud de Elche.

 La jornada ha sido organizada por el área de I+D+i de Enfermería del Departamento de Salud de Elche y La Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana (Fisabio).

Para celebrar el Día Mundial de la Disfagia, la radio de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche se ha trasladado al vestíbulo del edificio de consultas para realizar un podcast dedicado a hablar detalladamente de la patología, con entrevistas a especialistas y pacientes.