La Acequia Mayor urge al Ayuntamiento, Consell y Diputación ayudas para su restauración

La Acequia Mayor del Pantano, el histórico sistema de riego que abastece de agua al Palmeral ilicitano y que forma parte del Patrimonio de la Humanidad reconocido por la Unesco, precisa de 1,5 millones de euros para su restauración y puesta en valor, según ha cifrado el recién nombrado presidente de la comunidad de propietarios, Francisco Picó quien releva en el cargo a Pascual Urbán.

 Los canales que forman parte de esta infraestructura hidráulica, cuya historia se remonta a la época andalusí, también son desde hace un año considerados Bien de Interés Cultural (BIC) desde la aprobación de la nueva Ley del Palmeral. Un motivo de peso más por el que la Acequia Mayor y sus ramales deberían de mejorar sus condiciones.  

Precisamente, la puesta en valor y recuperación de la obra histórica es la prioridad de la nueva junta que se ocupa de la gestión del entramado de regadío. Una asignatura pendiente que lleva décadas sobre la mesa por la necesidad de contar con financiación para poder asumir los costes de la rehabilitación. 

Por este motivo y tras haber visto aumentar su protección, el presidente de la comunidad de propietarios piensa tocar la puerta no solo del Ayuntamiento que ya colabora, sino de la Diputación y de la Generalitat Valenciana para que se impliquen con ayudas públicas. «Es necesario que vayan todas las administraciones a una para poder potenciar el valor cultural, histórico, artístico y turístico», señala Picó, quien ve los nuevos fondos europeos como una oportunidad para poder atender esta reivindicación. 

Y es que, la aportación que realiza el Ayuntamiento de 70.000 euros anuales, lograda este mandato por primera vez, es la única subvención que recibe la comunidad, según su presidente, lo que hace que sea insuficiente para atender todas las necesidades existentes.

Canal desvío

La recuperación del canal del desvío, infraestructura previa a la presa del Pantano, es una de las mayores urgencias. Y es que las conducciones y galerías de este sistema presentan problemas de colmatación en algunos puntos, impidiendo circular el agua de riego a través de ellas. 

Según Francisco Picó, existe riesgo de desprendimiento en algunos túneles, donde se han llegado a robar sillares y piedras. No hay que olvidar que este canal de desvío se terminó de construir en 1910 y desde el año 2010 está prácticamente inoperativo. 

La rotura de esta red y la colmatación de los lodos afecta y hace que salte más agua de lo normal por el vaso del Pantano.

Además de esta importante rehabilitación, hay otros puntos de la Acequia Mayor que se encuentran en un estado deficiente, con estructuras desmoronadas desde hace años. Ejemplo de ello es a su entrada en la ciudad, junto al convento de las Clarisas.

En la agenda de la nueva junta que gestiona la infraestructura está también difundir a la sociedad ilicitana la importancia y la historia que tiene una red de riego desconocida para una gran parte de la población. La intención es, según Picó, firmar convenios con las universidades para que se pueda estudiar el patrimonio histórico.

«La comunidad de propietarios de la Acequia Mayor del Pantano es probablemente la institución más antigua de Elche desde Alfonso X el Sabio. De forma independiente nace en 1790, cuyos propietarios se han ido ocupando con sus ingresos del mantenimiento», explica Picó, quien señala, no obstante, que la red de riego «pertenece al pueblo de Elche». De ahí, la importancia de garantizar su supervivencia.

Desaladora

Además de estos desafíos, la entidad de riego aspira a poner en funcionamiento el salto de agua para producir energía eléctrica que abarataría los costes de agua e incluso retomar el proyecto de una desaladora para reducir la salinidad del agua del río Vinalopó con las que se abastece a cultivos y al Palmeral ilicitano. 

También entra en los planes de la Acequia Mayor instalar placas solares para elevar el agua y conseguir mantener los costes.