Un legado de INFORMACIÓN para el Museo de Pusol

Una enorme linotipia, la máquina que fue imprescindible durante años para que los periódicos pudieran hacer llegar las noticias a sus lectores, preside la nueva exposición temporal del Museo de Pusol de Elche. "Un taller de noticias. En el interior del Diario Información" podrá visitarse en el Museo Escolar de Pusol hasta el próximo 16 de abril y permite conocer cómo era la redacción del que sigue siendo el periódico de referencia en nuestra provincia y cómo aquellos escritos a máquina de los periodistas con la última hora de la información se transformaban, gracias a los linotipistas y cajistas, en el ejemplar que llegaba a los quioscos de cualquier rincón de Alicante.

Pocos inventos han tenido tanto éxito y, al mismo tiempo, una vida tan corta, como la linotipia, una máquina que revolucionó la industria de la imprenta, porque creaba en líneas de plomo el texto original escrito por el periodista.

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Esta nueva exposición del museo que tiene el reconocimiento de la Unesco como Registro de Buenas Prácticas de Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial, recoge, principalmente, la linotipia que perteneció a INFORMACIÓN, y el taller de linotipistas y cajistas junto a la vieja redacción de la calle Poeta Quintana de Alicante, cerrada en 1980, antes de su traslado a unas nuevas y modernas instalaciones.

La muestra recrea los puestos de redacción, donde el periodista escribía a máquina las noticias, que luego pasaba a los linotipistas, con esa Linotipia Modelo-5 americana que data de los primeros años del siglo XX y que preside la estancia central. Además, se pueden ver los lingotes de plomo que salían de esa máquina con las líneas de texto y algunos de los ejemplares de INFORMACIÓN salidos de esas máquinas de linotipia y leer qué se cocía en las décadas de los 40, 50, 60 o 70, con noticias en las que, y esto no ha cambiado mucho, predominaban las informaciones relativas al turismo en la provincia. También se pueden contemplar unas magníficas fotos del mítico fotógrafo de INFORMACIÓN Perfecto Arjones, que con su maestría plasmó el trabajo de linotipistas, cajistas y redactores de aquellos años en los que la linotipia era el "alma máter" del periódico.

"Recrea el proceso de hacer el periódico antes de que existiera el offset (que aplica una tinta sobre una plancha metálica)", explica José Aniorte, comisario de la exposición. "Se trata de un proceso mecánico y fue la modernización del proceso manual", añade.

Se puede decir que la creación de un periódico era todo un arte, eran artesanos de las noticias quienes llegaron a escribir y a imprimir esos ejemplares de INFORMACIÓN por aquellos tiempos. Redacción e imprenta estaban en el mismo edificio. Cuando el periodista escribía la noticia a máquina la pasaba al linotipista. Este se encargaba de crear en líneas de plomo el texto original, gracias a la linotipia, un trabajo que, hasta entonces, se tenía que hacer manualmente cogiendo letra a letra. Se fundían, a 400 grados, los textos en líneas completas, formando cada una de ellas un solo bloque o lingote metálico.

Una vez enfriados, los lingotes pasaban al taller de composición, donde los cajistas montarían las hojas completas del periódico. De esta composición, se hacía un molde de cartón con el que se sacaba una nueva placa de plomo fundido, con forma curva, que pasaba a la rotativa e imprimía las hojas en papel. "El linotipista tenía tres teclados, uno para mayúsculas, otro para minúsculas y otro para números y caracteres especiales", explica Aniorte.

El diario INFORMACIÓN nació en 1941 y desde su pequeña redacción, durante los primeros años, unos pocos periodistas se enfrentaron a la hazaña de abarcar la actualidad de toda la provincia. En una posguerra en la que los recursos eran prácticamente nulos, el taller contaba con solo tres linotipias, una platina de ajuste y una pequeña rotativa, que permitían sacar un periódico, por aquel entonces, de tan solo cuatro páginas, de tamaño sábana.

Paulatinamente, el número de páginas fue aumentando hasta alcanzar las 32, después de la renovación por completo de la estructura técnica del periódico con 15 nuevas linotipias tras un voraz incendio que sufrió el taller en 1965. Estas nuevas máquinas eran capaces de imprimir una tirada de mil ejemplares a la hora, como se explica en la exposición temporal del Museo de Pusol. La linotipia que se expone, y que perteneció a INFORMACIÓN, fue adquirida por la Generalitat y donada años más tarde al museo, en noviembre de 2004.

Audiovisual

La exposición se completa con un audiovisual en el que un linotipista de INFORMACIÓN, Benito Cerón, y el periodista Fernando Ramón, actual subdirector de INFORMACIÓN, cuentan sus experiencias en aquella vieja redacción y en la imprenta con linotipia. "Fue un gran invento, una revolución, se componían los textos en una mesita donde nos dejaban los trabajos y cuando caían las matrices podíamos leer lo que poníamos, incluso en redonda o en negrita", explica Cerón.

Cerón recuerda cuando tenía que llevar la primera página a la casa del censor durante la dictadura para que diera el visto bueno a la portada. "Entonces es cuando se podía imprimir", señala. "

Pusol se vuelve multicultural

La vinculación con Elche queda también patente desde los inicios del diario, con corresponsales que escribían desde la ciudad hasta que se creó la primera delegación en 1970, bajo la dirección de Félix Morales. Las noticias dedicadas a la ciudad copan muchas de las páginas que se pueden ver en la exposición.

La inauguración de la muestra ha contado con la asistencia de la edil de Cultura del Ayuntamiento de Elche, Marga Antón, y de Benito Cerón, antiguo linotipista del diario INFORMACIÓN. El acto lo ha iniciado Rafa Martínez, director del Museo de Pusol, para continuar con las explicaciones sobre la exposición en particular por parte del comisario, José Aniorte, y el propio Benito.

Un grupo de escolares ha podido conocer el funcionamiento de una redacción del periódico y cómo se imprimía con linotipia, algo que, a buen seguro, casi les ha sonado a ciencia ficción en la era de lo digital que lo ha transformado todo, con especial incidencia a los periódicos, ahora muy centrados en sus ediciones en la web que, ni de lejos, podían imaginarse aquellos precursores que trabajaron en la era de la linotipia.