El cambio climático obligará a retrasar la plantación de alcachofas para ahorrar agua

Las altas temperaturas cada vez más frecuentes en verano y que se prolongan hasta bien entrado el otoño son temibles para la cosecha de alcachofas. Una hortaliza que necesita de temperaturas suaves, y frías en su última fase. La plantación se realiza en verano, a finales de julio, cuando el calor sofocante, como el del pasado periodo estival, hace mella ya que retrasa el crecimiento de esta planta. Una investigación de la Estación Experimental Agraria de Elche ha demostrado que retrasar de dos a tres semanas la plantación no solo permite darle más tiempo al suelo, también un importante ahorro de agua, puesto que en ese periodo se evapora muy rápidamente.

Todo, sin afectar a la producción, ya que por encima de los 20 grados de media entre el día y la noche esta planta ralentiza su crecimiento. De esta manera se haría frente al cambio climático que está afectando a cultivos como la alcachofa. 

Las hortalizas de invierno se cuecen

Esta investigación se ha dado a conocer en la X jornada técnica sobre el cultivo de la alcachofa bajo el título «Innovación en el cultivo de la alcachofa» que se celebró este martes en la Estación Experimental Agraria de Elche de la Generalitat.

Así, se ha comprobado que atrasar la plantación de la alcachofa es perfectamente viable y recomendable. «En vez de plantar el 27 de julio, es mejor hacerlo el 10 o el 15 de agosto», explica Joaquín Parra, técnico de Investigación y Transferencia de la Estación Experimental Agraria de Elche.

En esta zona del sureste las altas temperaturas estivales, que se prolongan en otoño, están provocando que esta hortaliza de invierno no crezca como debiera. «Huir de los finales de julio, que es cuando más calor hace, y trasplantar ya entrado agosto», señala Parra. 

El trasplante de esta hortaliza es a finales de julio y los expertos proponen realizarlo a mediados de agosto

El atrasar la plantación permitiría, como se ha constatado, que enraizara mejor, que el sistema radicular se viera más favorecido, que eche antes hojas y que crezca más. Y, sobre todo, ahorrar el agua que un productor usaría para regar estas plantas entre el final de julio hasta mediados de agosto, que es el periodo en el que este recurso hídrico se evapora con gran rapidez. 

De hecho, tal y como han comprobado los técnicos de la Estación Experimental Agraria, la planta de la alcachofa crece igual si se planta a finales de julio o si se hace a mediados de agosto, puesto que en ese periodo, básicamente, deja de vegetar por el calor. «Nos encontramos que en verano, con este cambio climático que provoca tan altas temperaturas, las plantas de alcachofa que tradicionalmente se ponen a final de julio, cuando llega septiembre no se han movido», explica.

Retrasando la plantación, «al final, llegarías a septiembre con el mismo tamaño y con 15 días menos de cultivo», señala Parra. Así lo ha comprobado. «Este año plantamos el 10 de agosto y en la UMH el 27 de julio y el 1 de septiembre las plantas habían crecido lo mismo y han producido al mismo tiempo», asegura. 

Con la alcachofa de semilla no ha habido diferencias en la producción entre plantar el 27 de julio y hacerlo hasta el 24 de agosto, en la variedad Green Queen. La Blanca de Tudela, no obstante, aguanta un poco mejor la temperatura. «Lo ideal para plantar todas sería a partir del 10 de agosto», indica este experto. 

Problema

Lo que ha quedado puesto de relieve en estas jornadas es que el cambio climático es un problema. Las plantaciones de alcachofas, con el calor, se abren, no alcanzan su tamaño máximo, tienen muchos problemas de conservación e, incluso, les sale pelo. «No nos interesan las heladas, pero sí el frío, con temperaturas de 7 grados, perfecto». 

Esta temporada, las temperaturas inusuales han mermado la producción, primero mucho calor y después poco frío para lo que debería de hacer y heladas en enero. «Hemos tenido problemas de crecimiento, la planta no ha crecido como debiera por esas condiciones climáticas», lamentan los productores.

Incluso, en la variedad Blanca han tenido problemas de hongos de suelo al plantarlas y después. 

En esta jornada también se explicó el proyecto, cuyos resultados estarán el año que viene, consistente en la utilización de plantas biocidas contra patógenos como los nematodos del suelo. Se plantarían en los suelos donde se van a cultivar alcachofas durante 50 días y, cuando empiezan a florecer, se trituran e incorporan al terreno. Al ser resistentes a los patógenos, el cultivo que se plante habrá minimizado el problema. En el campo de ensayo de la Estación Experimental Agraria de Elche están con esta investigación. 

Variedades

También se habló de variedades. Lo que se busca es que el agricultor pueda elegir la alcachofa que mejor se adapte a su mercado. El que busque el mercado interior, mejor la Blanca de Tudela, para exportar la Green Queen, que es una variedad que puede superar el medio quilo y se vende bien en Francia, y, para conserva, la más pequeña, la Green Triumph, que son de 50 gramos, que se usa para minicorazones en tarro. «Y aquellos que pueden combinar mercado interior con exterior recomendaría Green Queen», señaló Parra.

Por su parte, Pedro Mínguez, del Centro de Demostración y Transferencia Agraria El Mirador de San Javier, desveló el ensayo de aplicación de agua ozonizada y acolchado en alcachofas con el que se pretende reducir los tratamientos fitosanitarios y el consumo de agua, hasta en un 20%.

Y Rick Berentsen y Maite Peiró, de BASF Vegetable Seeds, explicaron el trabajo que realizan con la Universidad Politécnica de València para seleccionar plantas que sean más precoces. Buscan el gen que se corresponde a la precocidad de la alcachofa para seleccionarlo. En el sureste es una investigación muy interesante porque aquí se comercializa la alcachofa temprana, ya que se produce cuando en otras zonas productoras de España está helando.

La jornada concluyó con una charla coloquio en la que participaron, entre otros, Antonio Galindo, presidente de Alcachofa de España, y Antonio Ángel Hurtado, presidente de la asociación Alcachofa Vega Baja del Segura.