Una treintena de familias San Antón, en Elche, tendrán acceso a un alquiler social abonando un 30% como máximo de su renta

Una treintena de familias vulnerables de San Antón tendrán acceso a un alquiler social en las viviendas nuevas del barrio abonando como máximo un 30% de su renta. La Generalitat Valenciana ha dado su autorización para que 33 pisos recientemente construidos pasen al parque público de viviendas tras acreditar estos vecinos que no tienen recursos suficientes para adquirir en propiedad una casa nueva pese a ofertarse a un precio muy por debajo del mercado. No todos pueden pagar entre 36.000 y 49.000 euros por una casa, con opción de plaza de garaje, (de esas cantidades se les descuenta entre 15.000 y 23.000 euros por su antigua vivienda cuyo destino es la demolición).

Algunos de estos vecinos lanzaron hace unas semanas un mensaje de auxilio al equipo de gobierno para que se pudieran agilizar los realojos ante las deficiencias cada vez más insostenibles que tienen dentro de sus hogares. El alcalde, Carlos González, ha asegurado este jueves que los traslados están más cerca. Por lo pronto, el próximo viernes la junta de gobierno aprobará el pliego de condiciones para realojar a las familias que quedan en los bloques 11,12,13 y 14 del humilde barrio ilicitano, unos inmuebles que en cuanto se vacíen serán derribados, previsiblemente este año.

Para definir las condiciones económicas que tendrán que abonar los inquilinos, Servicios Sociales analizará la situación individualizada de cada uno, tal y como ha explicado el primer edil, para garantizarles el derecho a una vivienda por el tiempo máximo posible y "no dejar a nadie fuera". El objetivo municipal es que estos alquileres sociales tengan "vocación de permanencia" con las familias.

Mientras esto ocurre, San Antón está viendo cómo avanza la construcción del cuarto inmueble social de 54 viviendas de 47 metros cuadrados y de 58 metros cuadrados, según el número de dormitorios. Las obras están al 25% de su ejecución y la previsión municipal es que acaben a finales de este 2023. Su coste será de 3,7 millones de euros.

La construcción de más inmuebles, en espera

Tras este cuarto edificio del plan de regeneración urbana que supone una inversión millonaria en la que se han implicado la administración central, la autonómica y el Ayuntamiento de Elche, las gestiones para seguir avanzando en la construcción de más inmuebles está pendiente de más reuniones para avanzar. A lo largo de los últimos ocho años ha sido cuando se han edificado las cuatro nuevas torres de viviendas. Superado este complejo desafío que ha incluido un sinfín de trámites y de gestiones con otras administraciones, la pretensión del ejecutivo local es que en la segunda fase puedan levantarse 400 viviendas, es decir, cinco edificios de forma simultánea para acelerar lo máximo posible el traslado de los vecinos.

Y es que lo que se le prometió a los residentes de este humilde barrio ilicitano hace más de dos décadas es que los 2.000 vecinos de San Antón tendrían un piso social a un precio asequible. De momento, se han levantado 338 viviendas y hay unas 700 familias a la espera de más pisos que desconoce cuándo serán una realidad.

Según el regidor socialista, de lo que en estos momentos está pendiente es de concertar una reunión para retomar el asunto con el nuevo secretario de Agenda Urbana del Ministerio de Vivienda. Y es que el anterior, la persona con la que hasta ahora había abordado el asunto de San Antón, ya no está en el cargo por la crisis de los trenes de Cantabria y Asturias.