La UMH busca solución al conflicto en la cafetería de Altabix en Elche

CSO pide la contratación directa de las trabajadoras y la institución quiere un pliego con contratos de fijo discontinuo | Duras acusaciones del sindicato hacia el vicerrector de Infraestructuras

Entrada a la cafetería de Altabix, en el edificio del mismo nombre de la UMH.

Entrada a la cafetería de Altabix, en el edificio del mismo nombre de la UMH. / INFORMACIÓN

Rubén Míguez

Rubén Míguez

Vuelve el conflicto con la cafetería del edificio Altabix de la Universidad Miguel Hernández (UMH). La Universidad pretende sacar un nuevo pliego después de que haya quedado desierta la licitación tres veces desde que caducó la gestión en 2020 a la actual adjudicataria, Catering 45, que mantiene el servicio prorrogado.

Sin embargo, no encuentra interés por parte de las empresas del sector. Por ello, el vicerrector de Infraestructuras, Pedro Vicente Quiles, se reunió con tres sindicatos y la representante de las trabajadoras donde trasladó la propuesta de la Universidad de cambiar en el nuevo pliego los contratos fijos por fijos discontinuos, como tienen las otras cinco cafeterías de la UMH.

Han pasado 20 días y no ha recibido contestación, pero sí un duro comunicado del sindicato Consejo Sindical Obrero (CSO) en el que exige la contratación directa por parte de la Universidad de las 8 trabajadoras de la cafetería y no solo ataca a la empresa concesionaria, también al vicerrector de Infraestructuras, al que acusa de «hostigar a las compañeras de cafetería para que accedan a deteriorar su actual contrato».

Una acusación que Pedro Vicente Quiles niega y rechaza. «No he hostigado a nadie, solo hicimos la propuesta para equiparar a estas trabajadoras con los empleados del resto de cafeterías que tenemos, ya que están cerradas dos meses al año, y buscamos también un pliego que sea atractivo para las empresas para que no quede desierto por cuarta vez», explica.

Respecto a asumir la gestión directa manifiesta que es algo que no se puede hacer y recuerda que las trabajadoras serán asumidas por la nueva empresa que resulte de la adjudicación.

Mal servicio

En lo que coinciden el sindicato y la Universidad es en el mal servicio que presta la actual empresa que mantiene, a su vez, un fuerte conflicto con sus trabajadoras. «Faltan productos y el menú no es bueno», se queja el vicerrector, quien está convencido de que «una empresa seria sacaría adelante la cafetería».

La UMH ha invertido 100.000 euros en los tres últimos años para hacer más atractivo el servicio, con un nuevo quiosco.