Piden seis años de cárcel a un agente inmobiliario por estafar un millón de euros en Elche

La Audiencia Provincial tiene previsto juzgar este miércoles en Elche a un agente inmobiliario acusado de estafar más de un millón de euros. Fiscalía solicita una pena de cárcel de seis años. 

La víctima fue un hombre a quien, según se informa desde el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), se le ofrecía la participación en inversiones de promociones de viviendas con condiciones irreales, talescomo hipotecas muy bajas o bien propiedades libres de cargas. 

Los hechos ocurrieron a partir del año 2017 y , según mantiene la acusación pública, el perjudicado respondía reiteradamente a las peticiones de dinero que le hacía el encausado. Todo ello, al parecer, por la confianza que tenía depositada en él y, sobre todo, porque el hombre llegó a entregarle documentos privados manipulados que respaldaban el engaño. La Fiscalía pide por tanto para el procesado una pena de prisión de seis años por los delitos de estafa agravada y falsedad.

Además, también ese día, en la misma Sección Séptima de la Audiencia Provincial desplazada a Elche, está previsto que comience juicio oral por una causa que tiene que ver con la economía sumergida.

En concreto, se piden dos años de prisión y una multa por un delito contra los derechos de los trabajadores para un hombre y una mujer, responsables de una empresa de calzado de Elche, por tener nada menos que a nueve empleados sin contrato de trabajo y sin estar dados de alta en la Seguridad Social. 

Los hechos ocurrieron hace más de ocho años, en concreto el 9 de febrero de 2015, cuando miembros de la Inspección de Trabajo se desplazaron hasta la sede de la mercantil y constataron la situación de los empleados.

Y es que Elche vive el fenómeno social ligado a la existencia de la economía sumergida como algo arraigado y normal. Esta al menos es una de las conclusiones del último estudio de la Universidad Miguel Hernández (UMH) hecho público en su día, realizado en la ciudad y encargado por el Ayuntamiento para hacer una radiografía del problema y tratar de combatirlo.

Tras entrevistar a más de 650 personas del casco urbano, de Torrellano y El Altet, el informe advirtió de que el 82% de los encuestados veía este problema con normalidad y, al mismo tiempo, prácticamente casi todos los participantes, un 90%, opinaron que este tipo de prácticas irregulares son frecuentes o muy frecuentes en su entorno más inmediato.