Las colas por falta de transporte vuelven al aeropuerto y los taxistas temen otro verano conflictivo

Las colas de pasajeros en el aeropuerto de Alicante-Elche, a la espera de un medio de transporte que les lleve a su destino, vuelven a repetirse cuando está a punto de estallar la temporada alta. Esta misma situación ya se dio el pasado año, tras la reactivación del turismo después de que la alerta sanitaria por el covid se diera por superada, lo que provocó no solo quejas de los usuarios de la estación aeroportuaria de El Altet, sino también de parte de los propios taxistas, de los clientes en el casco urbano de Elche e incluso de la Asociación de Empresas Turísticas de Elche (AETE).

Y es que la falta de una mayor frecuencia de autobuses y también de un servicio nocturno de transporte público en el aeropuerto, además de la sobrecarga de trabajo de los taxistas ilicitanos, ha llevado a que en esta puerta entrada del turismo en la provincia se genere un cuello de botella. 

Las largas esperas para coger un taxi no solo se repiten ya de noche o de madrugada en este mes de mayo, sino también en pleno día. Este pasado lunes, por ejemplo, el primer avión llegaba sobre las 8.17 horas y a las 9.30 horas ya había decenas de personas esperando en la parada de taxis.

Último fin de semana

Además, durante el último fin de semana ha habido clientes, según fuentes de los taxistas, que sobre las 5 de la mañana permanecían a la espera. Una docena de servicios se tuvieron que realizar en la madrugada del domingo al lunes dado el retraso de un vuelo, aseguran los conductores profesionales, algunos de los cuales auguran un «verdadero verano de infierno» al temer que no se pueda cubrir toda la demanda en un aeropuerto que no para de crecer, mientras el malestar y la conflictividad también crece en la ciudad.

El aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández cerraba abril con 1.435.274 pasajeros, lo que suponía un incremento del 7% respecto al mismo mes en 2019 y una subida del 19,5% en comparación con el mismo periodo del pasado año 2022. El aeropuerto finalizaba 2022 con 13,2 millones de pasajeros. Por eso una parte de los taxistas creen que la falta de taxis, no solo en Elche ciudad, se va a volver a notar incluso más que el pasado verano.

AETE

AETE ya advirtió en diciembre que hoteles, restaurantes y centros de ocio llevaban varios meses con problemas para encontrar taxis en la ciudad, con retrasos que podían superar incluso los 45 minutos.

La asociación estimaba que la ampliación de licencias, que aún no se ha hecho realidad, no resuelve la situación y pedía al Ayuntamiento que se implicara con urgencia en la búsqueda de una solución definitiva y estable a un problema que lleva camino de convertirse en endémico y que, aseguran, ocasionará un daño difícil de reparar a la imagen de Elche como destino turístico.

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Servicio en la ciudad

Para los empresarios del sector sería necesario replantear la distribución de los taxis que dan servicio en la ciudad y el aeropuerto e iniciar conversaciones con las plataformas de VTC para que complementen el servicio y cubran las necesidades de la ciudad.

Los taxistas, precisamente, no quieren que los VTC ganen más terreno en el municipio, de ahí que una parte de los mismos reclamen que se den, por parte del Ayuntamiento, todas las licencias que quedan, más de 20, y que ya autorizó antes de la pandemia la Generalitat.

Desde el Ayuntamiento, por su parte, se ha intentado que no todo el peso de la movilidad en el aeropuerto recaiga en los taxistas, como hasta ahora, pero tras varias reuniones a varias bandas no se ha sido capaz de convencer a las empresas de autobuses para que aumenten conexiones, frecuencias o al menos habiliten un autobús nocturno.

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Indignación

Mientras, el verano pasado en las redes sociales quedó plasmada la indignación de muchos ilicitanos y visitantes que veían, por un lado, cómo en las paradas de taxis no había vehículos y, por otro, cuando se pedía por teléfono uno o tardaba muchísimo tiempo o no aparecía. Esto obligó al Ayuntamiento a advertir a los taxistas acerca de que debían prestar servicio sí o sí en la ciudad por muy apetitosas que fueran las carreras del aeropuerto, e incluso se indicó que se harían inspecciones para comprobar que esto se estaba cumpliendo.

Recientemente representantes de los taxistas y el alcalde de Elche, Carlos González, mantenían una reunión en la que se abordaron varios asuntos, pero no ha trascendido que se tocaran al parecer el tema de las licencias. En esa reunión se habló de concretar dos fechas fijas para el examen de capacitación, más controles para los VTC o colocar puntos de recarga eléctrica, entre otros.