Detenida en Elche por falsificar recetas con el nombre de su madre octogenaria

La arrestada por la Policía Nacional obtenía barbitúricos para la ansiedad en una farmacia de la ciudad como si hubieran sido recetados a su progenitora de 81 años

Agentes de la Policía Nacional junto a una farmacia del centro de Elche.

Agentes de la Policía Nacional junto a una farmacia del centro de Elche. / INFORMACIÓN

Rubén Míguez

Rubén Míguez

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Elche a una mujer por un presunto delito de falsedad documental, tras descubrirse que, presuntamente, había falsificado varias recetas médicas utilizando los datos de su madre de 81 años de edad, con el fin de obtener barbitúricos en un farmacia de la ciudad.

La investigación se inició cuando un farmacéutico de la ciudad comunicó por correo electrónico al área de Participación Ciudadana de la Comisaría de la Policía que había detectado una posible falsificación de recetas.

El remitente señalaba que se había dado cuenta de que el número de receta, así como el código de barras de otras prescripciones, con las cuales una mujer habría retirado en dos días seguidos los barbitúricos, era el mismo. Todas las recetas deben llevar un diferente y único número para ser válidas.

Los fármacos que la mujer había obtenido con estas recetas solamente podían ser suministrados bajo receta médica y eran de la familia de la benzodiacepinas, fármacos normalmente usados para tratar problemas de ansiedad, o incluso insomnio provocado por la propia ansiedad, entre otros trastornos médicos.

Investigación

Así pues, el grupo encargado de los delitos contra el patrimonio de la Comisaría de la Policía Nacional de Elche inició una investigación. Lo primero fue el visionado de las imágenes de la farmacia donde la mujer había adquirido los fármacos. Así, los agentes pudieron comprobar que se trataba de una mujer de mediana edad que entregaba las recetas a nombre de una mujer de 81 años.

Tras varias pesquisas de investigación, los policías encargados del caso, averiguaron que la octogenaria mujer tenía dos hijas. Siguiendo esa línea de investigación, junto con el análisis de las imágenes de las cámaras de seguridad, pudieron llegar a determinar que una de ellas había sido la que había estado adquiriendo los medicamentos fraudulentamente, por lo que fue detenida acusada de un delito de falsedad documental. 

La arrestada, de 51 años de edad y nacionalidad española, fue puesta en libertad tras prestar declaración en dependencias policiales, y está a la espera de ser citada para comparecer en sede judicial.