Las plantas solares empiezan a dar cuantiosos beneficios a las empresas agrícolas de Elche

El campo empieza a ver a las energías renovables como un negocio que dispara la facturación de quienes venden electricidad

Nuevos Riegos El Progreso obtiene un superávit récord de 1,2 millones

Parque solar instalado junto a la balsa de Sivaes en Elche que se inauguró en 2021 para ahorrar costes eléctricos a los regantes.

Parque solar instalado junto a la balsa de Sivaes en Elche que se inauguró en 2021 para ahorrar costes eléctricos a los regantes. / Información

Rubén Míguez

Rubén Míguez

Las plantas solares están comenzando a ser un negocio bastante suculento para algunas empresas agrícolas. La centenaria comunidad ilicitana de Nuevos Riegos El Progreso ha cerrado el último ejercicio, el de 2022, con un beneficio récord que reinvertirá en renovables.

Su facturación se disparó a los 1,7 millones de euros, un 18% superior al ejercicio 2021, con un beneficio neto de 1.210.743,41 euros. Un balance de resultados que su Junta General de Accionistas acordó reinvertir en el desarrollo de dos plantas solares fotovoltaicas para hibridación con la Central Hidroeléctrica de Hoya García y la participada Central Hidroeléctrica de Berberín, en Murcia.

Un buen negocio gracias a las energías renovables. Y todo en plena polémica en Elche por la avalancha de solicitudes de nuevas plantas solares en el Camp d’Elx. Las dos últimas se aprobaron el viernes por el ejecutivo en funciones de PSOE y Compromís, en Perleta y Saladas.

Nuevos Riegos El Progreso construyó una planta solar en Elche junto al balsa de Sivaes, que inauguró en 2021 y que reduce considerablemente el coste del agua y beneficia al medioambiente. Esta planta solar de 400 MW ahorra a los regantes unos 70.000 euros en consumo de electricidad.

La sociedad se constituyó en 1906 e inició actividad en 1910 para el aprovechamiento y venta para el riego, de aguas procedentes de la cuenca del río Segura y la producción de energía hidroeléctrica. El aprovechamiento y venta para el riego del agua, como bien de dominio público, estaba regulado por una concesión que caducó en 2016, momento en el que pasó a manos de los propios comuneros, aunque la mayoría no ejerce su derecho a aguas. El mercado eléctrico es la única actividad que hoy desarrolla.

Turbinas de central hidroeléctrica de Riegos El Progreso. | INFORMACIÓN

Turbinas de central hidroeléctrica de Riegos El Progreso. | INFORMACIÓN / rubénmíguez

Impacto negativo

El informe del Consejo de Administración de esta sociedad destacó la actividad en el mercado eléctrico durante el año pasado, marcado por la crisis energética y la fluctuación de los precios. Aunque la producción de energía fue menor (9 millones de Kw/h) que en 2021, la facturación aumentó en un 15% por la subida de precios.

El Consejo de Administración advirtió sobre la regularización realizada por la CNMC, que afectó los resultados financieros, y alertó sobre posibles intervenciones futuras y con probables cambios en los caudales ecológicos del río Tajo pueden tener un impacto negativo.

Ante esta situación, se decidió invertir en una planta solar fotovoltaica para complementar la producción de energía hidroeléctrica. Una apuesta por energías renovables y por diversificar los métodos de producción eléctrica que dan muy buenos resultados, a tenor de los beneficios.

Caudal

De este modo, la planta solar de Hoya García estará instalada en los terrenos contiguos que Nuevos Riegos El Progreso ha adquirido y su producción se sumará a la energía hidroeléctrica que ya produce la central, que actualmente aprovecha el caudal del río Segura para la producción de energía renovable.

«Una costosa inversión, pero trataremos de aprovechar la apuesta por las energías renovables para sacar el máximo rendimiento a la inversión que estamos llevando a cabo», apuntan desde la Junta de Nuevos Riegos El Progreso. La planta, que comenzará a desarrollarse en el último trimestre de 2023 e iniciará su actividad en 2024, tendrá una potencia de 1,6 MWn y ocupará 21.000 metros cuadrados.

Por su parte, la planta solar de Beberín, instalada junto a la central hidroeléctrica participada que explota utilizando también el caudal del río Segura, contará con 1,8 MWn y una superficie de 28.300 metros cuadrados. También abrirá durante 2024.

Polémica

En Elche la polémica por la ocupación de terrenos agrícolas para plantas solares continúa. Colectivos ecologistas se muestran preocupados y han alegado contra 18 plantas solares proyectadas en Elche, la mayoría de competencia autonómica.

Los ecologistas de Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) han cuantificado en 260 hectáreas el suelo, con «alta capacidad agrológica» o para cultivar, que se vería afectado en el Camp d’Elx si todas las iniciativas planteadas obtuvieran luz verde de la Generalitat y del Ayuntamiento.  El colectivo defiende priorizar suelo de bajo valor o cubiertas de naves.

Por su parte, el presidente de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, Ángel Urbina, considera que es compatible «la modernidad con la tradición». «Hay zonas donde se pueden poner plantas solares y zonas ricas agrícolas donde no se deberían poner», expresa.