El proyecto de autobús a las pedanías de Elche prevé un déficit anual de 3,4 millones

El servicio está ofrecido a la concesionaria del servicio urbano, con una previsión de gasto de 4,2 millones de euros y de ingresos por venta de billetes de 794.000 euros

Autobús que realiza el trayecto a La Foia

Autobús que realiza el trayecto a La Foia / Matías Segarra

M. Alarcón

M. Alarcón

Uno de los proyectos estrella que sirvieron para rubricar el acuerdo PP-Vox que llevó a la Alcaldía a Pablo Ruz en junio de 2023, como fue la promesa de una sensible mejora del servicio de autobús a las pedanías, supondrá un coste anual para las arcas públicas a partir de 2025 de unos 3,4 millones de euros porque el modelo anunciado por el regidor, de diez líneas y 15 autobuses, solo prevé que los ingresos cubran el 19 % el gasto total.

Así lo dice el proyecto que ha servido de base para el anuncio del alcalde y que tendría que llevar adelante la concesionaria del servicio urbano (Autobuses Urbanos de Elche SA), tal y como anunció el edil de Movilidad, José Claudio Guilabert. En los informes se prevé que la puesta en marcha del servicio tenga que hacer frente a gastos por valor de 4,2 millones de euros cada año, mientras que la venta de billetes y la publicidad solo supondría ingresos por valor de 814.304 euros (794. 469 y 19.800 euros, respectivamente).  

Ciudadanos de segunda

El proyecto prevé que 2,1 millones de pasajeros usen el autobús para desplazarse a las pedanías o bien venir al casco urbano, con un precio por billete similar al urbano de 1,35 euros (1,45 euros en horario especial), pero se estima que solo paguen por él un 37 % de los usuarios porque la mayoría está exento o se beneficia de reducciones, lo que supone que los ingresos se queden en esos 794.000 euros.

Autobús a La Marina, en una imagen de archivo

Autobús a La Marina, en una imagen de archivo / Matías Segarra

Contrato

Ahora bien, si el servicio convence a los usuarios, porque es mucho mejor que el que existe en estos momentos, en manos de varias empresas distintas y prorrogado desde hace años sin que salga un contrato que lo racionalice, lo lógico será pensar que aumentará el número de pasajeros y, como los costes previstos son fijos, se reducirá el déficit que en estos momentos está dispuesto a soportar el equipo de gobierno para que «no haya ilicitanos de primera y de segunda», dijo el alcalde, Pablo Ruz.

¿Pero cuántos ilicitanos se pueden considerar de segunda? En teoría, hay algo más de 47.000 potenciales usuarios, que son los que están censados en el Camp d’Elx con Torrellano (7.900), El Altet (6.200), La Baya (3.100), La Foia (3.000), Arenales (2.900), Altabix (2.800) y La Marina (2.600) como principales núcleos de población.

Gastos

¿Cómo se desgrana esos 4,2 millones de gasto?. El más importante es el del personal, que supone algo más de 2 millones de euros; para carburantes y aditivos, 944.000 euros; para aceites y grasas, 16.600 euros; neumáticos, 55.400 euros; amortización de la flota, 354.000 euros; financiación de la flota, 65.000 euros; para reparación y conservación de vehículos, 106.000 euros; instalaciones fijas, 36.000 euros; seguros, 72.000 euros; canceladoras y emisoras, 56.000 euros; paradas, 10.700 euros; varios (3,5 %), 132.000 euros; paradas, 10.700; y beneficio industrial fijo, 332.000 euros.

El informe propone que el contrato se firme por la diferencia entre ingresos y gastos, es decir 3,4 millones anuales que, al ser por dos ejercicios, aumentaría a 6,8 millones de euros.

Conductores

El servicio prevé contar con 44 personas para su gestión, 39 de ellas serían conductores. Hay cuatro empresas que ahora cubren estas líneas (La Inmaculada, Mollá, La Melillense y Baile) y existe la posibilidad de que parte de su personal se subrogue con las condiciones que tiene. Los autobuses, de 12,9 metros de longitud, deberán estar en servicio un máximo de 14 años y capacidad entre 78 y 74 pasajeros (43 de ellos sentados), en función de un espacio para una silla de ruedas.

Uno de los autobuses para llegar a Arenales, en una imagen de archivo

Uno de los autobuses para llegar a Arenales, en una imagen de archivo / INFORMACIÓN

Todas las líneas

En cuanto a las líneas serán: Elche-Arenales directo (41 kilómetros y frecuencia 90 minutos); Elche-Parque Empresarial-Torrellano (31 kilómetros, de tres a cinco autobuses y frecuencias de 12 a 15 minutos); Elche-Torrellano-El Altet-Arenales del Sol (46 kilómetros, frecuencia de dos a cuatro autobuses y de 25 a 45 minutos); Elche-Perleta-Valverde-Balsares-l’Altet-Arenales del Sol (55 kilómetros y 90 minutos de frecuencia); Elche-Asprillas-Las Bayas (22 kilómetros y 40 minutos); Elche-La Hoya-La Marina (37 kilómetros y 50 minutos); Elche-Algorós-Derramador-L’Alcudia (24 kilómetros y 45 minutos); Elche-Matola-Algoda-Museo de Puçol-Algorós (18 kilómetros y 45 minutos); Elche-Estación AVE-Matola (20 kilómetros y 60 minutos); Circular Playa l’Altet (4,5 kilómetros y 30 minutos); y Circular Playa La Marina-El Pinet (7,5 kilómetros y de 34 a 40 minutos).

A la espera de la contestación de la empresa

El concejal de Movilidad, José ClaudioGuilabert, aseguró el viernes, a preguntas de los medios de comunicación, que aún no tienen respuesta de la empresa a la propuesta que se les ha realizado desde el Ayuntamiento para que asuman el servicio de transporte público a las pedanías. Oferta que se habría hecho en base a las cifras y datos que obran en el informe municipal que da viabilidad al proyecto: Un contrato de unos 3,6 millones de euros anuales por dos ejercicios, hasta que venza la concesión en 2026 del transporte urbano y al mismo tiempo el acuerdo con el municipio. No cabe un acuerdo con otra mercantil del sector pues nadie más tiene una autorización expresa de la Generalitat para ejecutar el servicio. Sí o sí debe ser con Autobuses Urbanos de Elche SA, pero ¿y si no aceptan?.

El pasado 2 de septiembre, a su regreso de las vacaciones y cuando el informe de los técnicos estaba recién hecho, dando con ello luz verde a la viabilidad de un ambicioso proyecto, muy superior al que se tiene en estos momentos, el alcalde de Elche, PabloRuz, anunció que habría un nuevo servicio que mejoraba el transporte público, palabras que reafirmó casi dos meses más tarde, el 30 de octubre, cuando dio algunas pinceladas del proyecto, que no ha variado un ápice desde su elaboración por los técnicos, como ese aumento de líneas(hasta diez) o el hecho de que se vayan a implementar hasta 15 autobuses para cumplir la demanda los 365 días del año. Ahora bien, ni ese día existía ni este viernes tampoco, por las palabras del concejal, aún un acuerdo cerrado con la concesionaria.

No da la sensación de que exista un nerviosismo en el equipo de gobierno (PP y Vox) por este asunto, pese a ser una de las grandes propuestas electorales. De no llegarse a un acuerdo, tendría que buscarse una fórmula legal para la prórroga de las actuales concesiones a fin de no dejar aislados a los vecinos del Camp d’Elx.  

Híbridos

Una de las principales cuestiones, sin duda, será esos 15 autobuses porque el equipo de gobierno quieren que sean híbridos, lo que supondría una inversión de 4,6 millones de euros. El Ayuntamiento pagaría los intereses de esa financiación de los vehículos, lo que supone 655.400 euros en diez años (65.500 euros al año), pero, ¿de dónde saldrían en tan poco tiempo?. 

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