Detenido en Elche por usar imágenes íntimas de su pareja y enviarlas desde un perfil ficticio

La difusión de imágenes de contenido sexual o que afectan a la intimidad de una persona no suele acabar bien. Que le pregunten sino a un joven de 22 años que acaba de ser detenido por la Policía Nacional de Elche por un presunto delito de descubrimiento y revelación de secretos. De por medio, dos fotografías de carácter totalmente privado de una chica de 20 años; un perfil aparentemente «anónimo» en una red social; insultos, vejaciones y amenazas de que se iban a publicar más imágenes; y un final inesperado. Así se puede resumir esta historia que ha acabado en arresto.

Denuncia

Todo comenzó con la denuncia que presentó una chica de 20 años en la Comisaría de Elche. La joven puso en conocimiento de los agentes que su pareja había recibido a través de un perfil desconocido en una red social dos fotos de ella manteniendo relaciones sexuales con un varón. La joven, en este sentido, dejó bien claro ante los agentes que en ningún momento había dado su permiso ya no sólo para distribuir esas imágenes, ni siquiera para que se le pudiera grabar. Hasta el extremo de que no debía ser consciente de la existencia de esos fotogramas hasta que llegaron esos mensajes. La sorpresa y la indignación, pues, debieron ser más que evidentes cuando vio esa dos capturas que debían proceder de un vídeo. 

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Insultos, vejaciones, amenazas

Sin embargo, la cosa no había quedado ahí. Desde ese mismo perfil, la denunciante había recibido también insultos, vejaciones y amenazas de que se publicarían más imágenes similares a las que se le habían remitido a su pareja.

Con estos puntos de partida, la Policía Judicial de Elche abrió una investigación para tratar de esclarecer quién estaba detrás de estos hechos. Fue así como dieron con el presunto autor. Ahora bien, la perplejidad debió ser total y absoluta con el resultado obtenido: quien, al parecer, había creado el perfil en la red social, había reenviado las imágenes, y había insultado, vejado y amenazado a la joven era su propia pareja.

El presunto autor

Fue así como los agentes de la Policía Nacional acabaron deteniendo al joven por un presunto delito de descubrimiento y revelación de secretos, que se enmarca dentro de los delitos contra la intimidad, el derecho a la propia imagen y la inviolabilidad del domicilio, y dando traslado de los hechos al juzgado. Significativo en este caso es que el chico, según fuentes de la investigación, tenía antecedentes, aunque por otros delitos diferentes.

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Alertas

Al parecer, este tipo de denuncias, al menos en los términos que se ha formulado esta, no suelen ser habituales, afortunadamente. Eso no quita para que, como viene alertando la Policía Nacional desde hace tiempo y constatan, además, las estadísticas, los delitos cibernéticos hayan ido ganando peso, entendiendo por tales aquellos en los que se utiliza un ordenador o cualquier otra tecnología digital para cometer una actividad ilegal, aunque sólo sea porque esa misma tecnología facilita lo que venía siendo un delito tradicional. Alertan de eso, y de la importancia de mantener la privacidad en la era de las redes sociales.

De nuevo, las redes sociales

Significativo es que, si en este caso, una red social es lo que, supuestamente, sirvió al joven detenido para reenviarse a sí mismo las imágenes de contenido sexual de su pareja, y amenazar, vejar e insultar a la víctima, también fue una red social la protagonista de otro suceso que tuvo lugar en Elche hace un par de meses. En aquel momento, dos chicos de Caudete, en Albacete, quedaron con dos menores por redes sociales. Sin embargo, cuando se presentaron a la cita, apareció otro chico con un nunchaco, un arma tradicional y característica de las artes marciales, al que siguió un grupo de entre diez y quince encapuchados que empezaron a propinarles una paliza, según la denuncia de las dos víctimas. También les robaron los móviles, la cartera con la documentación a uno de ellos, una chaqueta y una camiseta. Al final, hubo varios detenidos por la Policía Nacional de Elche, entre ellos, las dos chicas, ambas de 17 años, con las que habían quedado las víctimas a través de las redes sociales.