La empresa Red Eléctrica de España (RED) ha aceptado, tras reunirse en Valencia con el alcalde del municipio, Pascual Díaz, y el edil de Urbanismo Fermín García y según fuentes del Ayuntamiento de Petrer, desviar la línea de alta tensión, de 220 KV, para que no pase por el caso urbano. La línea contaba con 1.500 metros lineales que atravesaban el municipio y varias partidas rurales afectando a los vecinos que veía la línea eléctrica a menos de cuatro metros de sus viviendas.

La actuación proyectada por la empresa responsable contemplaba conectar la línea de Benejama-Petrer con la subestación que Iberdrola tiene en El Poblet. El primer tramo vendría a ser aéreo y los cables irían anclados en torres metálicas que se instalarían en las partidas rurales del Gingebre y Tejeras del Río-Cuatro Vientos. El trazado pasaría a ser subterráneo al entroncar con el suelo urbano afectando a gran parte del municipio.

Este trazado fue denunciado por Gobierno, oposición y por el portavoz de la Plataforma de Afectados, José Navarro, tras comprobar el grave impacto que supondría para el municipio, algo que también apoyó el Consell ayudando a los municipios afectados que querían cambiar esta línea por otros trazados de menor impacto.

A los dos trazados alternativos, propuestos por el Ayuntamiento que seguían la autovía de Madrid, se une un tercero que pretende utilizar la ya línea de alta tensión cerca de la A-31, de unos 60 Kv, para ampliarla y evitar una nueva construcción. Esta red atravesaría la Sierra del Caballo, de forma subterránea para evitar un impacto medioambiental, según confirmó José Navarro ayer a este diario.

Sin un acuerdo firme de por dónde se establecerá el cableado de la línea de alta tensión, sólo falta esperar que el Ayuntamiento valore las alternativas de ubicación de la línea y establezca un acuerdo con la compañía eléctrica para dar luz verde a la línea de alta tensión.