El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana ha condenado al Ayuntamiento de Monóvar a pagar una indemnización a la empresa Aqualia por valor de más de 4,6 millones de euros. Es el resultado de un litigio generado en 2010 por el gobierno municipal del PP, GIMV y Bloc siendo alcalde Salvador Poveda. Para el actual equipo de gobierno socialista el origen de esta «herencia envenenada» se remonta a la decisión del gobierno popular de rescindir, en 2010, el contrato con la empresa Aqualia por supuestos incumplimientos de lo previsto en el contrato de concesión aprobado en 2001. Una medida que tuvo como respuesta la denuncia contra el Ayuntamiento por parte de la mercantil.

En 2014 el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 4 de Alicante falla a favor del Ayuntamiento y reconoce que la empresa debe pagar 1.614.773 euros. No obstante, Aqualia Gestión Integral del Agua recurrió al TSJ que finalmente ha resuelto que la rescisión de la concesión fue ilegal y, por tanto, estima la postura de la mercantil, que se reclama por la liquidación del contrato un total 4.657.426 euros más intereses desde abril del año 2014. Esto es, más de cinco millones de euros, más de la mitad del presupuesto municipal de Monóvar.

Con «una mezcla de sorpresa y rabia» ha acogido el actual alcalde, Natxo Vidal, la sentencia por los importantes perjuicios que acarrea para el pueblo de Monóvar y sus vecinos. «Nos encontramos ante una situación endiablada que tiene unos culpables concretos, que son quienes llevaron el mando de este Ayuntamiento cuando se tomaron estas decisiones, pero que ahora, vamos a tener que pagar cada uno de los vecinos y vecinas de este pueblo. Es una situación injusta, y que supone un golpe tremendo para todos», ha lamentado el socialista Natxo Vidal añadiendo que «es el actual Ayuntamiento el que tiene que gestionar esta herencia envenenada de los gobiernos del PP, y no nos queda otra salida que seguir luchando por defender hasta el último aliento los intereses de nuestros vecinos, pese a que este problema lo hayan generado otros». Por eso ha consultado a expertos para tomar la mejor opción, y una de ellas pasa por presentar un recurso a las instancias superiores del TSJ.

Igualmente, el equipo de gobierno ha indicado que con esta sentencia «llueve sobre mojado» ya que Aqualia ya ganó otro juicio al Ayuntamiento de Monóvar por la construcción de la piscina municipal cubierta. Una cuestión que, indirectamente y según explican los ediles del PSOE, determinó la decisión del gobierno del PP de rescindir el contrato del agua.