El amor al triatlón también puede dar lugar al amor de pareja. Es lo que les ha pasado a los atletas Loli García Martín-Viveros y Javier Llopis Díez, miembros federados del Club Deportivo Triaspe. Cuando Cupido lanza sus flechas en el ámbito deportivo lo ideal, pensó Javier Llopis cuatro meses atrás, es declarar el amor en plena competición. Así que el deportista aspense decidió darle una romántica sorpresa a su amada ilicitana y, sin que ella supiera nada, ultimó todos los detalles para realizar una romántica pedida de mano justo cuando cruzara la meta del Triatlón Ciudad de Torrevieja.

Solo sus compañeros del club sabían lo que estaba tramando y, por supuesto, se volcaron en ayudarlo manteniendo el más absoluto secreto. Pero llevar a terminó el plan no fue fácil. Llopis forzó su preparación en un tiempo récord a pesar de arrastrar una importante lesión de hombro. Era la única manera de poder inscribirse en el mismo triatlón que su pareja. La prueba Sprint constaba de 750 metros de natación en el puerto, 20 kilómetros en bicicleta y 5.500 metros de carrera a pie.

Aunque las mujeres iniciaron la competición dos minutos después que los hombres, Loli García, que es monitora de natación y experta en esta disciplina, consiguió adelantar a su compañero al salir del mar. Así que los planes comenzaban a torcerse porque él debía llegar antes que ella a la meta para poder darle la sorpresa. Al pretendiente no le quedó más opción que «darlo todo» en la prueba de ciclismo, en la que consiguió adelantar a su pareja. Y tampoco podía relajarse en la carrera a pie si quería llegar con tiempo suficiente para coger el estuche con el anillo de pedida y preparar el regalo: un «pepino» de bicicleta envuelta en papel con su lazo rojo y todo.

Llopis no quería implicar a la organización pero la organización se implicó sola tan pronto como supo lo que se disponía a hacer. Así que el «espiker» se «vino arriba» y se dedicó a relatar por megafonía el «bonito momento» en directo, haciendo partícipe del mismo a todo el público. «El triatlón es amor, es amistad, lo es todo...», dijo mientras los espectadores dedicaban a los enamorados un fuerte aplauso y se escuchaban los típicos: «¡Vivan los novios!» y «¡Que se besen, que se besen!».

Y es que tan pronto como Loli completó el recorrido Javier la abrazó y, tras hincar su rodilla en tierra, le declaró su amor entregándole el anillo de pedida. Ella se quedó tan asombrada que en un primer momento no supo ni cómo reaccionar. Pero terminó emocionándose y, por supuesto, besó a su enamorado y le dio el «sí quiero». Entonces le mostró la bici y ella la alzó para que todos vieran su regalo mientras ambos comenzaban a recibir las primeras felicitaciones. Y para acabar el gran día los atletas del Triaspe lo celebraron con una comida previa a la boda, que la pareja ya ha fijado para diciembre.

Pero lo que nadie podía imaginar es que esta pedida de mano tan deportiva iba a generar tanta expectación. El video que la organización del Triatlón de Torrevieja ha colgado en su Facebook lleva camino de convertirse en viral tras superar las 7.000 reproducciones en tres días. Así es el amor.