El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, se ha adentrado en los pasillos de la empresa, que Stuart Weitzmat dejo en manos del grupo empresarial Trapestry pero que mantiene el cuidado por los zapatos de lujo de señora. En el transcurso de la visita ha mostrado su apoyo al sector zapatero de las comarcas del Vinalopó del que ha dicho que «ha demostrado su capacidad permanente de actualización».

La dirección de la empresa Stuart Weiztman firma especializada en calzado de lujo, propiedad del grupo Tapestry (antes Coach) le ha pedido al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, que se involucre en la plataforma de desarrollo que van a plantear al empresariado local a modo de catalizador de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+I) así como para favorecer la formación no sólo en los aspectos técnicos sino también en la gestión de las empresas.

Por otra parte, Puig ha insistido en la excelencia de la producción de la zona y en la relación que la marca de Witzman mantiene con la globalización. El Jefe del Consell ha indicado que «aquí no se trata de luchar contra la globalización sino de aprovechar sus ventajas para mejorar nuestro posicionamiento».

Una mayor productividad, una apuesta en investigación y desarrollo y el diseño es fundamental para enfrentarse al mercado exterior y en estas premisas es donde se debe manetener el foco según ha comentado Puig. En este sentido, el presidente ha insistido en que en estas apuestas puede contar con el acompañamiento de las instituciones autonómicas.

El Jefe del Consell ha paseado entre mobiliario blanco impoluto, que poco tiene que ver con una empresa tradicional. Al mismo tiempo que guarda ese olor tan característico de colas y cuero, que recuerda que éste en un espacio artesanal y fabril donde la excelencia es una de las marcas de la casa. Allí ha podido ver el mimo con el que se cuida la fabricación para hacer moda y a la vez intentar que la mujer no sufra por llevar un tacón alto, que le haga lucir una pierna infinita.

Poco antes de la visita por las instalaciones, el presidente de la Generalitat mantenía una reunión con integrantes de la empresa, el alcalde de Elda, Rubén Alfaro y la alcaldesa de Petrer, Irene Navarro. En ella se habló de las perspectivas de crecimiento de la división Stuart Weiztman del grupo y de cómo el incremento en el número de pares puede repercutir socialmente en las dos ciudades.

Stuart Weitzman, tras su compra por la empresa estado unidens, ha mantenidos su principal centro de producción en Elda (Alicante), donde una decena de fábricas trabajan en la elaboración de sus zapatos de alta calidad. Desde su dirección indican que el proyecto de desarrollo como marca preve triplicar el volumen de negocio en los próximos cinco años. Y esto supondrá un fuerte impacto en el tejido social y empresarial de las dos ciudades.