El hermano del fallecido en el crimen de Rabosa, José Emilio Millán Chocero, se encuentra detenido en los calabozos de la Comisaría de Elda-Petrer. Los agentes de la Policía Nacional lo detuvieron durante la noche del miércoles por supuestas amenazas de muerte al arrestado en relación a la muerte violenta de su hermano, Fernando Millán Chocero.

Cabe recordar que el vigilante del parque de montaña de Rabosa arrestado el martes fue introducido ayer en el edificio judicial a las 12.50 horas por la puerta de atrás. Con esta medida tan inusual como excepcional, la Policía Nacional quiso evitar que se produjera un altercado con el hermano del fallecido, que estaba esperando la llegada del acusado desde primera hora de la mañana. Tras dos horas en el juzgado, los agentes volvieron a jugar al despiste a las 15.10 horas sacando de nuevo al investigado por la puerta de atrás para introducirlo esposado en el furgón con destino a la Comisaría.

Por la tarde, durante los posteriores registros llevados a cabo por la Policía Nacional con el arrestado, fue cuando se produjeron las supuestas amenazas de muerte, lo que llevó a los agentes a proceder a la detención de José Emilio Millán y a requisarle todas las armas de fuego que posee de forma legal.

Cabe recordar que horas después de producirse el asesinato, ocurrido a poco antes de las seis del madrugada del 23 de septiembre de 2017, el vigilante de Rabosa le indicó al hermano, en la misma escena del crimen, que la muerte pudo haber sido accidental por la caída de una piedra del ribazo próximo; precisamente la piedra supuestamente utilizada para golpear mortalmente a la víctima. Cabe recordar que la autopsia reveló una fuerte contusión en la cabeza, el pecho y una fractura en la pierna derecha. Tanta insistencia en un momento tan traumático llevó al hermano del fallecido a discutir con el acusado por considerar esa versión absurda e incoherente. De hecho, José Emilio Millán siempre ha mantenido que el ataque fue premeditado y a traición en plena noche. Él cree que su hermano, que era un hombre valiente y de carácter fuerte, no tuvo opción alguna de defenderse, tal y como demostraría el hecho de que no mostrase evidencias físicas de haber intentado repeler la agresión.