La Virgen de las Virtudes lució en la Procesión su nuevo manto «de Fiestas», que se bendijo hace una semana. También estrenó en su tradicional paseo del día 8 de septiembre por las calles de Villena, el nuevo estandarte y el palio.

El manto de La Morenica se ha confeccionado con telas doradas, que son impermeables, y en él se han bordado los emblemas de las catorce comparsas, Junta Central, Banda Municipal y Sociedad Musical Ruperto Chapí, así como el escudo de la ciudad. El palio ha sido confeccionado por dos socias de la Junta de la Virgen, Isabel Martínez Paya y Virtudes Hernández Sánchez, que también colaboraron, con anterioridad, en la confección del «Manto 175 aniversario», el «Manto plateado» o el «Manto de la familia salesiana». El diseño es de Vicente Rodes.

La Procesión del 8 de septiembre cerró los actos del día grande de las fiestas patronales de Villena. Por la mañana se celebró la Embajada, en la que el bando cristiano arrebató a los moros el castillo. A las seis de la tarde se representó la Conversión del Moro al Cristianismo en el Altar Mayor de la Iglesia Arciprestal de Santiago Apóstol y, una hora más tarde, los festeros de la comparsa de Moros Viejos comenzaron a pasar delante del trono de la patrona para más tarde llenar las calles con el sonido de las marchas procesionales.

Y un año más los vecinos del barrio del Rabal abrieron de par en par las puertas de sus casas. Y es que desde hace unos años la asociación vecinal invita al resto de los habitantes de la ciudad a ver el paso de La Morenica por las angostas calles del centro histórico. Uno de los momentos emotivos se vivió cuando la imagen se paró ante la ermita de San José mientras repicaba su campana. Después la comitiva enfiló hacia la iglesia de Santa María. Allí las mujeres de la comparsa de Moros Realistas la llevaron a hombros hasta que acabó la Procesión.