El Ayuntamiento de Novelda ha llevado a cabo una intervención de urgencia sobre la torre izquierda del Santuario de Santa María Magdalena para prevenir desprendimientos y frenar el avance de las grietas que se han detectado sobre algunas de sus pilastras superiores. Mientras tanto se trabaja en el expediente para contratar a una empresa especializada en el patrimonio histórico y cultural que pueda asumir la restauración de esta parte del monumento más emblemático de la ciudad, así como del camarín que alberga la imagen de la patrona Santa María Magdalena, donde también se han detectado problemas de humedades.
El apuntalamiento de la bóveda superior de la torre afectada, la colocación de testigos en las fisuras para comprobar su evolución y la instalación de un mallazo que evite posibles desprendimientos son las medidas de choque aplicadas para garantizar la seguridad. De forma paralela el Ayuntamiento ha solicitado autorización para intervenir a la Conselleria de Cultura porque el Santuario está catalogado como BIC.
Según los informes técnicos las grietas, que fueron detectadas hace unos meses y afectan a tres de las cinco pilastras que sujetan la bóveda de la torre izquierda, podrían tener su origen en las filtraciones de agua que han provocado la oxidación y el aumento de volumen de la estructura metálica recubierta de piedra que conforma la torre. El mismo estudio descarta la existencia de un problema de cimentación en el edificio.
