La crisis sanitaria del coronavirus también ha generado una crisis económica con graves efectos sociales.Una crisis que no acabará cuando finalice el estado de alarma decretado por el Gobierno para frenar los contagios.
Del total de 63.687 expedientes presentados en la Comunidad Valencia, el 40% corresponde a la provincia de Alicante. Son concretamente 25.347 las empresas afectadas en las diferentes comarcas alicantinas y 127.324 los trabajadores que pasan a regulación temporal de empleo.
En Elda se llevaban tramitados desde el 12 de febrero hasta el 5 de mayo de 2020 un total de 640 ERTE con 2.816 trabajadores afectados, mientras que en Villena son 397 empresas con 2.343 operarios inmersos en la regulación de empleo.
El sector servicios es el más castigado por la crisis del Covid-19 correspondiéndole un 86% de las empresas afectadas por ERTE, seguido de la industria con un 7,7% y la construcción con el 5,5%.
En la ciudad de Alicante se han presentado un total de 5.065 expedientes afectando a 30.102 trabajadores; en Elche 2.920 expedientes con 15.364 trabajadores; en Orihuela 1.024 expedientes con 5.223 operarios; en Benidorm 1.675 expedientes con 12.173 empleados; en Torrevieja 1.173 expedientes con 4.818 trabajadores y en Alcoy 701 expedientes con 4.033 obreros.
UGT
"Desgraciadamente estas cifras no están contempladas en los datos conocidos el pasado lunes con 180.122 parados más en la provincia de Alicante y que van a continuar creciendo dado que, según nuestro datos, hay muchas empresas que están comunicando nuevos expedientes para solaparlos a los que ya tienen solicitados en el estado de emergencia una vez finalicen éstos", advierte Ismael Senent Cartagena, secretario general de UGT-PV Muntanya-Vinalopó-Vega Baja.
Desde la Unión General de Trabajadores se apuntan los tres objetivos que deben presidir la desescalada: la seguridad de los obreros, el mantenimiento del empleo y la protección de las personas desempleadas y más vulnerables. Por ello desde UGT se considera imprescindible continuar aplicando medidas económicas y laborales que protejan a quienes han perdido el empleo, no pueden acceder a uno o se han visto afectados por una reducción de ingresos.
Crisis de 2008
"Nuestra prioridad absoluta en este momento es que se frene la expansión del virus y prestar apoyo inmediato a los sectores y grupos de población más afectados, en particular a las empresas y los trabajadores de la economía informal. Pero es necesario que la protección alcance a todas las personas desprotegidas de esta crisis y también marcar la diferencia respecto de la respuesta política que se dio con la crisis de 2008, donde muchas personas fueron desprotegidas y abandonadas por las políticas públicas, dejándonos como herencia un incremento récord de la desigualdad en España, respecto al resto de países europeos, y una precariedad laboral y salarial estructural. que no ayuda en nada a salir de la situación actual", añade Ismael Senent.
UGT aboga por un cambio del modelo productivo que permita "que nadie se quede atrás". Ante el nuevo escenario de incertidumbre, son muy diversos los retos a los que se enfrenta la sociedad en esta crisis sanitaria y económica globalizada y sin precedentes.
