Los trabajos de excavación de la fosa común del Cementerio de Monóvar, donde se encuentran los restos de los cuerpos de 26 represaliados de la Guerra Civil y de la dictadura franquista, se han iniciado a las ocho y veinte minutos de hoy lunes, en un día considerado, por los familiares de las víctimas y de las autoridades, como historico para la Democracia española.

La fosa de Monóvar es la primera de la provincia de Alicante en ser abierta para recuperar los cuerpos de personas que fueron fusiladas tras la contienda finalizada en 1039.

Los arqueólogos Jorge García y Alfredo Rodríguez, responsables de la excavación, iniciaron los trabajos con el pico y la pala en el primer cuadrante de la cata, con la ayuda y colaboración de los investigadores Clara Serna (Universidad Autónoma de Madrid) y José Ramón García (Universidad de Alicante).

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García y Rodríguez señalaron a INFORMACION que "el principal obstáculo con el que se van a encontrar es la ubicación exacta del lugar donde se encuentran los cuerpos enterrados, ya que la documentación que disponemos es que fueron enterrados a 1,50 metros del muro del cementerio y hay de dos a tres puntos posibles".

El punto elegido para realizar la primera cata se encuentra a los pies de un bloque de nichos, construidos a partir de 1990 en uno de los muros, lo que representa que los 1,50 metros se convierten en 2 metros de lugar que aparece en la documentación existente. "Si este fuera el lugar del enterramiento, según los arqueólogos, algunos cuerpos podrian quedar debajo de esos nichos y sería imposible recuperarlos".

La consellera, Rosa Pérez Garijo, acompañada por el director general, José Ignacio Pérez Rico, visitaron el cementerio monovero, donde se entrevistaron con las autoridades locales y familiares.