Medio Ambiente tiene previsto realizar 50 pruebas analíticas puntuales que pretenden comprobar los niveles de sustancias químicas, como níquel y selenio, dos sustancias que la EDAR de la Mancomunidad no puede eliminar y que en varias ocasiones se ha detectado su presencia.
Las pruebas se realizarán a partir del próximo mes de septiembre en diferentes puntos de la ciudad. El objetivo de estas será detectar la posible presencia en las aguas residuales de sustancias químicas que presenten niveles por encima de los límites legales.
La edil de Medio Ambiente, Sarah López, ha destacado que “estas pruebas se realizan de manera rutinaria y hasta la fecha no se han podido realizar por la crisis sanitaria”.
López ha recordado que “Elda cuenta con una ordenanza municipal que regula de manera detallada los vertidos a la red de alcantarillado y establecen las obligaciones que deben cumplir los usuarios, así como las sanciones correspondientes por su incumplimiento”.
Po otro lado, cabe señalar que la Mancomunidad Intermunicipal del Valle del Vinalopó ya anunció un plan de control para evitar vertidos incontrolados de los cuatro municipios que la integran (Elda, Petrer, Monóvar y Sax) así como la modernización de la EDAR.
