Las obras llevadas a cabo en el cauce de la rambla de Charco Amargo han indignado a los vecinos de la zona al comprobar que “en lugar de solucionar un problema han creado otro”, dando lugar a más insalubridad y a empeorar la situación que ya sufrían.

La actuación llevada a cabo, en los últimos días, ha sido puesta en conocimiento del SEPRONA con el objetivo de “realizar diligencias complementarias y añadirlas a la denuncia presentada por los vecinos ante la Fiscalia de Medio Ambiente el pasado mes de agosto.

Los vecinos han denunciando a este diario que “no sabemos quien ha sido el promotor de estas obras. No sabemos si el Ayuntamiento de Monóvar, la Mancomunidad del Vinalopó o la Confederación Hidrográfica del Júcar. Lo que si sabemos es que durante tres días una excavadora ha estado sacando lodos producidos por el estancamiento de las aguas fecales durante los últimos 20 años y amontonándolos en los laterales de la rambla”.

El objetivo de esta actuación, según los vecinos, era profundizar en el cauce para que las aguas fecales no se estanquen y puedan correr rambla abajo, lo que el problema se aleja de la zona donde vivimos y lo trasladan a unos metros más abajo hasta desembocar al río Vinalopó.

El problema no se ha solucionado, más bien se ha acrecentado al dejar los lodos en los laterales de la rambla, produciendo unos olores nauseabundos, mosquitos y otros insectos, que están afectando a los vecinos, no solo de Charco Amargo, sino también de las zonas más cercanas.

Por último los vecinos han señalado que “no sabemos quien ha sido el lumbreras que ha ordenando estos trabajos que no van a solucionar nada, sino todo lo contrario, la situación de los vecinos de Charco Amargo ha empeorado de forma notoria”.