La Mayordomía de San Antón de Elda se ha visto obligada a cerrar la ermita para evitar aglomeraciones y prevenir contagios de coronavirus. La medida se ha adoptado al mediodía del domingo, ante un centenar de personas, tras la advertencia de la Policía Local para hacer cumplir la resolución que la Generalitat Valenciana emitió el 5 de enero.

Los responsables de la Mayordomía han asumido de inmediato la orden y han dado las gracias "a todos los que de una manera u otra os habéis acercado a saludar a San Antón y habéis traído el palico". Un gesto destinado a encender la simbólica hoguera y fotografiarse con el patrón de los Moros y Cristianos de Elda.

La ermita de San Antón comenzó a recibir las primeras visitas de los eldenses en la tarde del sábado cumpliendo las medidas de prevención frente al covid-19. Este domingo, festividad de San Antón, también estaba previsto mantener las puertas abiertas desde las 10 hasta las 14 horas. Pero el acto se suspendió sobre las 12 horas y decenas de eldenses no pudieron reencontrarse con el patrón. Cabe puntualizar al respecto que la concejalía de Fiestas había emitido una resolución negativa para celebrar el acto en base a un informe, también negativo, de la Policía Local.