El toque de queda impuesto por las autoridades para frenar la propagación del coronavirus está siendo aprovechado por la fauna para recuperar los espacios urbanos. La ausencia de tráfico y de presencia humana a partir de las diez de la noche da confianza a muchos animales salvajes para bajar de las montañas y recorrer los núcleos urbanos en busca de comida. Este fin de semana un vecino de Salinas se ha dado de bruces con un tejón en pleno casco urbano. Circulaba en su coche y tuvo tiempo de grabar con su teléfono móvil como huía el escurridizo mamífero nocturno cegado por las luces del vehículo.

El tejón estaba en medio de la calle pero al ver al coche de frente se subió civilizadamente a la acera. INFORMACIÓN

No es la primera vez que ocurre. En las últimas semanas otros vecinos también han visto zorros, tejones y piaras de jabalíes deambulando por las calles sin ningún temor.