El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha vuelto al Medio Vinalopó para visitar los enclaves históricos de la II República. En primer lugar acudió a la finca El Poblet de Petrer y posteriormente a la pedanía monovera de El Fondó, escenarios de uno de los momentos más importantes de la historia reciente de España: la presencia del último Gobierno de la República antes de que el presidente Juan Negrín y sus ministros partieran al exilio en 1939.
Zapatero ya estuvo en Elda hace tres años para asistir a la presentación simbólica de la vara de mando de Manuel Azaña. Fue entonces cuando se comprometió a volver y lo ha hecho con una visita que jamás olvidará y que ha calificado de «conmovedora, ilustrativa y enriquecedora».
Acompañado por la consellera de Calidad Democrática y por los alcaldes de Mónóvar, Petrer y Elda, y en presencia de numerosos simpatizantes que querían una fotografía con él, destacó, tras salir del refugio antiaéreo del Fondó, que «aquí late aún la memoria del último suspiro de la República expulsada por la fuerza, y también laten las personas que tuvieron que vivir momentos desgarradores huyendo al exilio y dejando a sus compatriotas».
Al visitar El Poblet, la sede del Gobierno de Negrín, reconoció que se trataba de un «espacio impresionante» y lamentó que fuese un lugar tan desconocido después de tanto silencio. «Ahí estuvo el presidente del Gobierno y el Gobierno de España. Por mucho que se quiera tratar de borrar la memoria, antes o después la memoria reaparece», subrayó comentando que «la historia se hace recuperando la historia y debe conocerse, aprenderse y difundirse en paz y por la paz. Pero un país no se quiere si no recuerda a los que sufrieron y no conmemora los sitios y los días en los que la gente dio la vida por un ideal democrático como fue la II República».
Por último Zapatero admitió que las decisiones que tomó con más «determinación y valentía» durante sus años en el Gobierno han sido las que mejores frutos han dado. «La Ley de Memoria Histórica fue un aldabonazo y la exposición de motivos la redacté personalmente porque tenía un gran interés en ella. Pero solo es un canto a la paz, al abrazo y al perdón». En su opinión El Poblet y El Fondó deben destinarse a la cultura y la educación «y que el turismo acompañe» a la justicia frente al olvido.
El eldense Iñaki Pérez Rico, director general de Calidad Democrática de la Generalitat Valenciana, explicaba tras la visita a la finca El Poblet de Petrer que había cumplido un anhelo. "Un deseo que espero que pronto pueda ser compartido, ya que he tenido la oportunidad de visitar la conocida como "Posición Yuste" en el argot militar. Poder visitar la casa señorial, pasear por el salón en el que se realizaron los últimos consejos de ministros del gobierno legítimo de la II República. Lugar en el que hace 80 años también estuvieron comunistas y socialistas, también en gobierno en coalición, el despacho en el que el doctor Juan Negrín conoció el levantamiento de Cartagena, en el que recibió la llamada de la traición de Casado, Besteiro y Mera, la última residencia en España de muchos de ellos, los jardines por los que encontrarían algo de paz en mitad de una guerra...Por eso ahora recuerdo las marchas reivindicativas con compañeros y compañeras de Petrer para que El Poblet se declarara BIC. Me acuerdo de hablar con Boni, con Paco, con José Ramón sobre el lugar, sobre aquellos días en los que Elda, Petrer y Monóvar se convirtieron en lugares protagonistas de la triste historia democrática de este país. De corazón espero que pronto podamos lograr que todas las personas que así lo deseen puedan visitarlo, haremos todo lo que podamos".
Y desde El Fondó marchó el expresidente del Gobierno tras una visita que nunca olvidará. Pero antes conversó con los vecinos, empatizó con los niños y atendió amablemente a las numerosas personas que le pidieron una fotografía. Algunos de ellos con mascota incluida.
